AL MAL TIEMPO BUENA CARA
La idea no es nueva. Las grandes campañas publicitarias, desde que empezó la crisis, han buscado de una u otra manera animar a los consumidores a luchar contra las adversidades.
¿Que las cosas vienen mal dadas y el hijo tiene que regresar a casa sus padres? Pues entonamos un himno de letra pegadiza. ¿Que la prima de riesgo y el paro se disparan, y la bolsa se tiñe de números rojos? Pues nos vestimos también de rojo, coreamos el mítico '¡a por ellos!' y redescubrimos todo lo bueno que nos une.
Pero ¿resulta útil publicitariamente esta estrategia? Pues depende de la campaña. "El cliente, en definitiva, tiene que terminar identificándose con ella".