Nascar
El coche de Myatt Snider perdió agarre en la última vuelta y chocó contra el muro para terminar dando una peligrosa vuelta de campana. El coche terminó ardiendo pero Snider salió ileso.
Pudo haber terminado en una auténtica tragedia pero afortunadamente no fue así, Myatt Snider perdió el control de su coche en la última vuelta de la prueba al ser tocado por un coche y se estampó contra el muro lateral para terminar dando varias vueltas de campana.
La tensión se palpaba en el ambiente y el coche de Snider terminó en llamas pero afortunadamente el piloto salió ileso y todo se quedó en un gran susto.
Pudo ser mucho peor ya que el coche accidentado estaba en medio del tráfico y no hubiera sido extraño que hubiera involucrado a varios coches más en el accidente, el motor, la suspensión y el tren trasero salieron volando.
Los más cinéfilos recordaron la escena de la película 'Destino final 4', donde un accidente similar termina en tragedia al llegar a la grada los trozos del coche accidentado. Afortunadamente los sistemas de seguridad de la NASCAR cumplen con los más altos estándares y se someten a infinidad de pruebas para evitar que un accidente pueda conllevar algún peligro para alguien que no este participando en la carrera.
Los narradores y comentaristas de la carrera quedaron petrificados al ver las imágenes repetidas del accidente pero afortunadamente pudieron dar la noticia de que el piloto estaba fuera de peligro.