Reino Unido
El futbolista del Old Chelmsfordiams acudió a su médico de cabecera debido a que su testículo había triplicado su tamaño tras una colisión con otro jugador.
Una agresiva entrada en un partido de fútbol le ha salvado la vida a Liam Landers.
El deportista de 27 años colisionó con otro jugador mientras disputaba un partido de fútbol con el Old Chelmsfordiams (Chelmsford, Reino Unido) el pasado mes de abril. Su rival le golpeó accidentalmente con la mano en la entrepierna. Landers, sin presentar ninguna lesión aparentemente, pudo terminar el encuentro a pesar del dolor. Sin embargo, a largo del día observó como su testículo derecho comenzó a hincharse.
En declaraciones a 'Mail Online', el inglés ha relatado como vivió lo sucedido: "Los dos íbamos a buscar un cabezazo desde un córner y luego chocamos, la mano del otro jugador me golpeó accidentalmente ahí. Eso duele. Normalmente, desaparecía después de unos minutos, pero esto se prolongaba"
El tamaño de la zona dolorida triplicó su tamaño y encendió las alarmas del futbolista, que acudió a su médico de cabecera en busca de un diagnóstico en dos ocasiones.
"Con el paso de los días no mejoró y todo el testículo triplicó su tamaño. Un día lo estaba revisando y casi al instante en mi mano se puso duro como una roca, era como una piedra", ha explicado Landers al mismo medio.
Remitido por el facultativo en su segunda cita, Landers se hizo más exploraciones y pruebas. Un análisis de sangre, tomografías computarizadas, ecografías y tomografías por emisión de positrones detectaron el tumor.
El diagnóstico del urólogo confirmando que la masa del testículo era cancerosa, obligó a Landers a pasar por quimioterapia y por una operación para extirparle la zona.
Actualmente, Landers busca transmitir un mensaje a todos los hombres: "Tuve mucha suerte de sobrevivir, así que estoy tratando de crear conciencia para ayudar a otros a detectarlo tan rápido como yo lo hice".
De esta manera, anima a que se tomen en serio realizarse exploraciones para prevenir la enfermedad: "Por lo general, los hombres dejamos las cosas en un segundo plano porque estamos muy inmersos en nuestro trabajo o estudio.
"Si no hubiera tenido ese incidente en el fútbol, probablemente podría estar muerto ahora"
"Si no hubiera tenido ese incidente en el fútbol, probablemente podría estar muerto ahora, en un hospicio o realmente luchando por mi vida", ha afirmado el futbolista.
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