LAS ANÉCDOTAS DEL DANÉS EN EL VESTUARIO
James McFadden fue compañero de Gravesen en el Everton y ahora ha desvelado algunas locuras del danés en el vestuario. "No tenía filtros, era aterrador, estaba loco. Era diferente, cara a cara era bueno, pero si estaba en grupo era mejor que intentaras evitarle. Es el tipo más hiperactivo que existe".
Entre una de las anécdotas más sorprendentes, McFadden cuenta que Gravesen llevó un arma de paintball al entrenamiento: "Una vez trajo una pistola de paintball y empezó a disparar a la gente".
Otra de ellas, la de los fuegos artificiales: "Otro día trajo fuegos artificiales. La sala de fisios estaba cerca, nuestro fisio tenía 50 años y estaba corriendo con los lesionados cuando Tommy apareció y le disparó con un cohete enorme".
McFadden también relató cómo se comportó un día en el campo cuando David Moyes, el entonces técnico del Everton, le ordenó que se dedicase a defender a Makelele: "Moyes le dijo 'Quédate con el hombre del fondo, no te muevas y no le pierdas de vista".
Pero a Gravesen le costó acatar las órdenes de Moyes: "Según le llegó la pelota al lateral rival, Tommy corrió hacia él para recuperarla. Moyes le dijo que qué hacía y él dijo 'Puedo llegar hasta él'. Moyes le volvió a ordenar que no se moviese y a la siguiente jugada estaba otra vez detrás del lateral. 'No puedo ayudarte jefe', le dijo Gravesen. Moyes se quedó resignado".
"No le importaba tener vacaciones lujosas"
Sus excentricidades también se extendían fuera del campo, según cuenta McFadden: "No salía y le gustaba tener deudas, no le gustaban las facturas. Tenía un gran coche y se compró un Renault Meganes en invierno porque decía que era coche de invierno. En verano llevaba botas Hummel y en invierno las cambiaba por unas de piel, y nunca las llamaba botas".
Por último, McFadden añade que "en verano no le importaba tener vacaciones lujosas, así que se quedaba en casa de su madre en Dinamarca. Tommy era brillante, en todo".