LIGA BBVA JORNADA 6 | DEPORTIVO DE LA CORUÑA 3 - 0 ESPANYOL
Victoria contundente del Deportivo de la Coruña en Riazor, por tres goles a cero, ante un Espanyol que se ha visto claramente superado. Los gallegos están a un grandísimo nivel de juego y se sitúan en zona europea de la mano de un inconmensurable Lucas Pérez.
El conjunto catalán buscaba su tercera victoria consecutiva, pero lo que se encontró fue una derrota contundente en un partido en el que el Deportivo no entró dormido como ante el Sporting, sino bien despierto.
Víctor Sánchez del Amo, que se enfrentó a Sergio González, su excompañero de vestuario en la plantilla del Deportivo, había advertido a sus jugadores por activa y por pasiva de que no podía repetirse un arranque de encuentro como el de una semana antes en Riazor. Citó a sus jugadores a una hora poco habitual, las 10:50, en el hotel de concentración para insistir en la idea de que no podían llegar "tarde" al partido, y el mensaje caló.
El Deportivo estuvo concentrado y en esos primeros compases el partido fue intrascendente en las áreas, hasta que Lucas Pérez se asomó por la del Espanyol a pase de Luis Alberto, su mejor socio en el campo. El balón salió demasiado cruzado, pero intimidó a un rival que se metió el primer tanto del encuentro en propia meta a los 14 minutos en una falta que ejecutó el franco-marroquí Fayçal Fajr y cabeceó a la escuadra Álvaro González.
Con marcador a favor, el Deportivo fue a más y volvió a avisar al Espanyol con un derechazo de Luis Alberto, que mañana cumple 23 años. En pleno intercambio, el equipo de Sergio también visitó el área coruñesa con una jugada personal de Duarte que Asensio completó con un disparo flojo a las manos de Lux. Por si había dudas, las disiparon los locales a los 27 minutos con una pared entre Luis Alberto y Lucas Pérez, que burló a la zaga catalana y definió ante Pau López.
La recta final del primer acto fue agria para el Espanyol, que estrelló un disparo de Pape Diop en el poste y se quedó sin el ecuatoriano Felipe Caicedo por lesión. El Deportivo afrontó la segunda parte con la intención de cerrar el partido cuanto antes y lo consiguió en poco más de un minuto con una acción del costarricense Celso Borges, que avanzó metros y encontró en el punto de penalti a Lucas Pérez, bigoleador.
La goleada aún pudo ser mayor si el palo no negara el gol a Oriol Riera, pero al Deportivo le bastó para acabar la jornada en puestos europeos, la misma zona a la que aspiraba el Espanyol, que acabó con diez por la expulsión de Pape Diop, que además se lesionó en la acción en la que vio la segunda amarilla del partido.