EUROLIGA | ANADOLU EFES 72-74 BARCELONA LASSA
El Barça Lassa ha ganado por 72-74 frente al Anadolu Efes en la segunda cita de su cruce en los cuartos de final de la Euroliga, respondiendo a los 18 puntos del base estadounidense Shane Larkin y mostrando una defensa férrea en los compases finales, para igualar así la eliminatoria (1-1) antes de jugar en el Palau Blaugrana.
De esta manera, el equipo culé ya no tendrá que abonarse a la heroica cuando se retome el 'play-off' en Barcelona, con margen todavía para el error. Y lo hará, además, después de resarcirse en el Sinan Erdem Dome, que ya no es inexpugnable esta temporada para los pupilos de Svetislav Pesic.
Si en el anterior partido los dolores de cabeza habían venido por el base serbio Vasilije Micic, en esta ocasión fue su homólogo Larkin quien mantuvo al Anadolu en la 'pomada'. El también base Krunoslav Simon era un secundario de lujo para el ataque local, a raíz de una primera mitad muy física (34-38) y con evidente juego interior.
Thomas Heurtel llevaba la manija del Barça desde lejos, mientras que Ante Tomic rendía bajo tableros. Sin embargo, demasiado solo se encontraba el pívot croata en esa batalla, pues Pierre Oriola se cargó pronto de faltas. Al menos había reaccionado Chris Singleton, gris en el comienzo del 'play-off' pero atento en este segundo compromiso.
Habiéndose vigilado de cerca, las ofensivas de cada equipo cogieron bastante velocidad nada más volver del descanso. Ahí, Larkin guio a los de Estambul hacia un parcial de 20-9 (54-47) que parecía definitivo, pues las gradas apretaban y nadie en las filas visitantes daba un paso firme.
Pero la estrategia de aguantar que ordenó Ergin Ataman, cual 'catenaccio', provocó que el Anadolu se frenara a sí mismo y el cuadro blaugrana replicó poco antes de cumplirse los 30 minutos. Una canasta de Heurtel y un triple de Singleton, mientras se desperezaban Pau Ribas y Adam Hanga, puso otra vez a los de Pesic por delante (59-62).
Las espadas más altas no podían estar para un último cuarto de vaivenes aunque igualmente taquicárdico. Pese a un arreón del Barça que abrochó un triple de Kevin Pangos (61-68), Micic emergió como en el duelo inaugural de la serie y comandó, junto a su compañero Adrien Moerman, un parcial de 11-3.
El electrónico del Sinan Erdem Dome reflejaba un 72-71, que empató Tomic con un tiro libre y que mantuvo inmóvil Víctor Claver con un rebote defensivo importantísimo, después de que Larkin fallara un triple frontal. A renglón seguido, Hanga puso el 72-74 con una penetración y la bola caliente estaba en manos del conjunto turco.
Simon fue el encargado de tirar el triple de la esperanza, pero también marró y la figura de Hanga apareció para desesperar a Ataman. Su rebote se unió a la poca pericia del Anadolu frenando la jugada, que como mínimo habría forzado más tiros libres. Para colmo, los turcos malgastaron 9 décimas en el cronómetro tras una pérdida rival y, con ello, se esfumó el sueño de poner a los culés al borde del abismo.