Renacer 23 de diciembre

“No grites, entiéndela”: Bahar le enseña a Rengin la forma más difícil de amar a un hijo

Bahar ha visto a Rengin rota por Parla y ha decidido decirle lo que nadie se atreve. Que deje de pelearse con su hija y empiece a escucharla de verdad.

Bahar y Rengin han acabado hablando de lo único que de verdad les duele: sus hijos. Rengin estaba fuera de sí con Parla. No entiende qué le pasa ni qué pretende. Le revienta pensar que su hija se dejó la piel para entrar en la facultad y ahora ni siquiera va. “¿Qué hace entonces? ¿Por qué juega conmigo?”, ha soltado.

Bahar ha intentado hacerla mirar atrás. Le ha recordado todo lo que Parla ha vivido desde pequeña: años intentando demostrar que valía, y el golpe de perder a Timur justo cuando parecía que por fin todo iba a ir bien. Para Bahar, Parla está intentando ocupar un sitio que no le toca, como si quisiera llenar un hueco imposible. Y le ha pedido una cosa: “En vez de gritarle, intenta entenderla”.

Pero Rengin le ha devuelto el golpe: si pide comprensión para Parla, ¿por qué no puede hacer lo mismo con Uras? Bahar ha saltado al momento. Para ella no es comparable: “¿Mi hijo busca su camino engañando a su mujer?”. Rengin le ha dado la razón en una cosa: no es lo mismo. Pero ha insistido en lo que sí ve igual: desde que Timur no está, los dos se han descolocado, y cada uno está intentando salir como puede aunque lo estén haciendo fatal.