Asya se despide para siempre de su pasado y comienza una nueva vida: “Jamás dudé de que existía la felicidad”

Asya ha decidido dejar su pasado atrás. Tras contarle toda la verdad a Volkan y decirle que ya no le quiere, la doctora por fin ha subido al avión con destino hacia su felicidad. 

Le ha devuelto a Derin todo el dinero y las propiedades que Volkan puso a nombre de Ali y también vende la casa que fue su hogar durante tanto tiempo. 

Londres será donde vivirá a partir de ahora al lado de Ali, el cuál desde hace meses vive allí para estudiar su carrera universitaria. 

Allí también vive Aras, el hombre con el que estuvo a punto de casarse. Solo el tiempo dirá si el amor vuelve a llamar a su puerta.  

“Partir no es más que un acto, pero lo que importa es abrir nuevas páginas. A veces lo haces sumergiéndote en el agua, a veces abrazando a un ser querido y otras veces tomando el avión que jamás pensaste que podrías tomar”.