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Arguiñano: receta de blanqueta de pollo

Karlos Arguiñano ha elaborado una receta de blanqueta de pollo a la que no le falta un detalle.

Arguiñano ha elaborado esta receta espectacular a la que no le falta un detalle. Con todo el sabor del caldo donde ha cocinado el pollo y el toque especial que Arguiñano le otorga siempre a sus recetas.

Ingredientes, para 4 personas

8 jamoncitos de pollo

4 zanahorias

1 cebolla

2 yemas de huevo

25 g de harina

30 g de mantequilla

60 ml de nata líquida

zumo de 1 limón

aceite de oliva virgen extra

sal

6-8 clavos de olor

2 ramas de romero

1 rama de tomillo

perejil

Elaboración

Pela las zanahorias, corta cada una en 4 trozos y tornéalas. Pon agua a calentar en una cazuela, sazónala y agrega las zanahorias. Cuécelas durante 8-10 minutos. Escurre, riégalas con un chorrito de aceite y resérvalas.

Pon los jamoncitos de pollo en la olla, agrega las ramas de romero, la de tomillo, los clavos y la cebolla (pelada y entera). Cúbrelos con agua, sazona y cierra la olla. Cuécelos durante 5 minutos a partir del momento en que suba la válvula. Retira los muslitos y resérvalos. Cuela el caldo y resérvalo.

Cuece durante 5 minutos y reserva los muslos | antena3.com

Para hacer la salsa, derrite la mantequilla en una tartera (cazuela amplia y baja), agrega la harina y cocínala un poco. Vierte 2-3 cazos de caldo y cocina (sin dejar de remover) los ingredientes hasta conseguir una salsa ligada. Vierte el zumo de limón, mezcla e introduce los muslos de pollo cocidos. Cocina todo conjuntamente durante 4-5 minutos. Aparta la tartera del fuego.

Cocina todo conjuntamente | antena3.com

Mezcla en un bol las yemas de huevo y la nata líquida, y añade un poco de perejil picado. Vierte la mezcla a la tartera y remuévela la cazuela hasta que los ingredientes queden integrados.

Mezcla las yemas y la nata líquida | antena3.com

Sirve 2 muslitos de pollo en cada plato y acompáñalos con las zanahorias torneadas. Decora los platos con unas hojas de perejil.

Consejo

No tiréis los trozos sobrantes resultantes de tornear las zanahorias. Podéis aprovecharlos y cocerlos junto con un par de patatas y unos puerros, para luego hacer una crema.