¿Qué se esconde tras la nueva estrategia de las constructoras de no publicar el precio de los pisos nuevos?

La compraventa de vivienda crece un 2,7 % en el primer trimestre de este año. Sin embargo, en el sector de la construcción se extiende el temor a un incremento de la inflación. Cada vez son más las constructoras que optan por no publicar el precio de los pisos hasta que finalizan las obras.

La compraventa de viviendas no se frena

El precio medio del metro cuadrado en España alcanza los 2.022 euros en los primeros tres meses de 2023. La demanda de vivienda parecía ralentizarse como consecuencia de la subida de los tipos de interés y consecuentemente del euríbor. Sin embargo, parece que el temor a futuros incrementos en las tasas de interés está empujando a los ciudadanos a la compra de vivienda.

En marzo del año 2022 el euríbor medio se situó en terreno negativo, en el -0,24 %. Un año después ha escalado hasta el 3,64 %, lo que supone un incremento de gastos más que notable para aquellos hipotecados a tipo variable. Pero esta subida tan significativa del euríbor, no ha conseguido enfriar el mercado inmobiliario.

Además, la falta de oferta de vivienda, sumada al incremento constante de la demanda, provoca una subida constante de los precios.

La cautela de las constructoras

Una nueva tendencia se abre paso entre las promociones inmobiliarias: no establecer el precio de los pisos a la venta hasta el momento en el que se finalizan las obras. Pedro Fernández Alén, presidente de la Confederación Nacional de la Construcción, asegura que "la fluctuación que se produce en los principales materiales que se utilizan en las obras aconseja no poner el precio definitivo". Una de las variables que juega en contra del sector es el tiempo: "Recordemos que la ejecución de las obras tiene un tiempo especialmente largo", señala Fernández.

Otro de los factores clave a tener en cuenta es la energía, cuyo precio es determinante para "fabricar ventanas de aluminio o fabricar ladrillos y azulejos". Eso hace que quienes intervienen en una obra tomen esa cautela de no publicar el precio de los futuros pisos, de forma que "no se rompa el equilibrio necesario que tiene que haber en un contrato", según Fernández. El empresario necesita certidumbre, y cuando tengan claro cuánto costará la ejecución de la obra "seguro que comunicarán los precios".