HACE 22 AÑOS
'Ocean's Eleven' contó con un reparto de lujo encabezado por George Clooney, Matt Damon, Brad Pitt, Julia Roberts y Andy García. Pero Mark Wahlberg y Johnny Depp fueron algunos de los actores a los que se les ofreció antes uno de los papeles aunque lo rechazaron. Ahora, Clooney ha revelado que se arrepienten de esta decisión.
El actor estadounidense George Clooney aseguró que los actores Mark Wahlberg y Johnny Depp rechazaron la oportunidad de ser parte de la película 'Ocean's Eleven' y que "ahora se arrepienten".
Según han informado los medios especializados de Hollywood, el actor de 61 años dijo que ambas superestrellas habían sido consideradas para interpretar al personaje de Linus Caldwell, pero que finalmente fue Matt Damon quien se quedó con el papel.
"Algunos famosos nos mandaron a la mierda. Mark Wahlberg, Johnny Depp, otros más. Ahora se arrepienten. Yo me arrepiento de haber hecho el puto 'Batman'", confesó Clooney en un panel del Festival de Cine TCM.
El filme, estrenado en 2001, además de tener a Damon y al propio Clooney en el reparto, reunió el talento de Brad Pitt, Julia Roberts y Andy García y era una nueva versión de la cinta homónima protagonizada en 1960 por el icónico Frank Sinatra.
Aunque para Clooney no fue fácil que Julia Roberts formara parte del proyecto y que, como puedes ver en el vídeo de arriba utilizó una divertida estrategia para lograr que la actriz aceptara el papel.
La producción alcanzó más de 450 millones de dólares en taquilla, lo que propició que se realizaran las secuelas 'Ocean's Twelve' (2004) y 'Ocean's Thirteen' (2007).
Además se hizo una película derivada protagonizada por Sandra Bullock, Cate Blanchett, Anne Hathaway y Rihanna llamada 'Ocean's 8' (2018) y existen planes hacer una más con Margot Robbie y Ryan Gosling como protagonistas, que estará ambientada en Europa en la década de 1960.
Recientemente Clooney fue uno de los artistas elegidos por el presidente estadounidense, Joe Biden, para formar parte del Comité de las Artes y Humanidades que le asesora en temas culturales.
Es considerado por muchos el último galán clásico de Hollywood, pues ha sabido jugar con su atractivo y utilizarlo para hacerse portavoz de las causas más variadas: la violencia en Sudán del Sur, los niños migrantes, la lucha contra el racismo, la crisis de los refugiados o la libertad de prensa.