CURIOSIDADES
Si alguna vez te has sentido estafado por el aire que contienen las bolsas de patatas fritas, no te preocupes, te explicamos la razón de que lleven tanto aire.
Vas a la compra y pasando por el pasillo de los aperitivos se te antoja una bolsa de patatas. Entre la infinidad de marcas y tipos de patatas fritas de bolsa existe una gran igualdad, el aire. Da igual la tienda, o el sabor, todas cuentan con una cantidad de aire, en ocasiones muy parecida o mayor a la de patatas, que nos puede hacer sentir engañados.
Puedes estar tranquilo de que no se trata de una trampa que te hacen las empresas para que gastes más. Es tan fácil como observar en la etiqueta del paquete el peso neto que contiene y así poder comparar la cantidad/precio. Si aún sigues con la mosca detrás de la oreja, te explicamos las razones de peso por las que las empresas de aperitivos rellenan sus bolsas con aire.
Alarga su vida útil
Lo primero que debes saber es que el aire que hay en el interior de las bolsas de patatas es nitrógeno. La razón por la que se introduce nitrógeno es para reducir la cantidad de oxígeno. Esto se hace porque al llenarlas de aire normal las patatas se humedecerían y se comenzarían a oxidar, perdiendo su sabor. El nitrógeno, al tratarse de un material inerte, funciona de conservante natural. Al rellenarlas de este gas, con el que convivimos cada día, evitan tener que introducir conservantes extras que cambien su sabor.
A prueba de golpes
Desde que las patatas salen de la fábrica hasta que las consumimos, pasan por diversos procesos. Piensa que sólo desde que tú las compras hasta que las pruebas suelen pasar por tus manos, el carrito de la compra, la bolsa… Para ello, el aire que se encuentra en su interior es perfecto para que no lleguen a su destino final hechas polvo. Este "relleno flojo" funciona como amortiguador para proteger tus patatas de golpes.
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