LA IMPORTANCIA DEL EJERCICIO FÍSICO
En este artículo te contamos las diferencias entre estos dos conceptos, muy parecidos a simple vista, pero que guardan algunas diferencias. También podrás saber cuál es el tiempo mínimo de ejercicio físico recomendado por la OMS.
En este artículo vamos a hablar de estos dos conceptos: sedentarismo e inactividad física. De entrada, puede parecer que tienen el mismo significado, pero en realidad, hay algunas diferencias. Por un lado, la RAE define "sedentario" como "dicho de un oficio o de un modo de vida: De poca agitación o movimiento". Por otro lado, ser inactivo físicamente se refiere a una persona que no realiza las horas de actividad física recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Para entrar más en detalle, nos hemos fijado en un artículo del blog del Hospital Clínic de Barcelona, en el cual el Dr. David Domínguez da las claves para diferenciar los dos conceptos y especifica las consecuencias de llevar una vida sedentaria y físicamente inactiva.
El Dr. Domínguez, especialista en Medicina Interna y Medicina del Deporte de la Unidad de Medicina del Deporte del Hospital Clínic de Barcelona, explica que ser una persona sedentaria y físicamente inactiva se refiere a estar en el lugar de trabajo unas ocho horas al día sentada delante del ordenador y, al acabar, no ir al gimnasio ni realizar ninguna otra actividad física.
Como acabamos de decir, estos dos conceptos tienen significados diferentes y, por lo tanto, se puede dar el caso de ser, a la vez, una persona sedentaria pero activa físicamente. Siguiendo el ejemplo anterior, si después de estar en la oficina sentada todo el rato vas a practicar algún deporte o a caminar o al gimnasio, esta es tu definición.
Unos párrafos más arriba, hemos dicho que es esencial seguir las horas de ejercicio físico recomendadas por la OMS. Pero, ¿cuáles son? La organización recomienda hacer entre 150 y 300 minutos de actividad física a la semana, pero para que sea efectivo, se debe hacer una "actividad aeróbica de intensidad moderada o vigorosa", subraya el Dr. Domínguez. Eso en el caso de los adultos, personas con discapacidad y personas con afecciones crónicas. Con respecto a los niños y adolescentes, es suficiente con "60 minutos al día".
El Dr. Domínguez hace referencia en su artículo a un estudio realizado a más de 44.000 personas de mediana edad y mayores sobre la relación entre sedentarismo, actividad física y riesgo de muerte prematura. Como era de esperar, hacer poco ejercicio físico aumenta el riesgo de mortalidad, pero la cosa se complica con los "períodos de sedentarismo prolongados".
En el otro lado de la balanza, la situación mejora un poco. El experto comenta que "aunque la asociación entre el tiempo sedentario y el riesgo de muerte se vio atenuada en aquellos [participantes del estudio] con niveles más altos de actividad física, el riesgo no desapareció por completo".
Efectivamente, la solución es muy sencilla: incorporar a tu rutina actividades físicas y hacer un pequeño cambio de hábitos. Por ejemplo, y siempre que sea posible, ir al trabajo caminando o en bicicleta o sustituir el ascensor por subir las escaleras. "Reducir o eliminar el sedentarismo ofrece beneficios notables para la salud a corto y largo plazo", concluye el doctor.