MEDICAMENTOS
Una de las dudas que más nos llegan a las farmacias es sobre el uso del ibuprofeno y del paracetamol. Repasamos en qué se parecen, en qué se diferencian y cuándo usar cada uno.
El ibuprofeno y el paracetamol muchas veces se utilizan indistintamente para tratar el dolor. No obstante, no es lo más recomendable atendiendo a las características de cada uno.
Hacemos un repaso a la información más importante de cada medicamento para que sepas qué necesitas en función de cada caso.
¿Para qué sirve el ibuprofeno?
El ibuprofeno es un medicamento del grupo de los AINES (antiinflamatorios no esteroideos) cuyas acciones principales son:
Se debe de usar cuando el dolor que padecemos es de origen inflamatorio como migrañas tensionales, dolor de garganta con inflamación, dolores musculares o molestias tras un golpe.
En la población pediátrica, el ibuprofeno en jarabe se suele empezar a usar un poquito más tarde que el paracetamol, ya que cuando son muy pequeños se recomienda más el paracetamol porque su acción antipirética es mayor. Aunque la combinación de ambos es muy usada, sobre todo cuando se intercalan cada 4 horas para fiebres y dolores muy intensos.
¿Para qué sirve el paracetamol?
El paracetamol es un medicamento ampliamente utilizado por la población adulta, pero sobre todo por la población infantil.
Sus acciones principales son la analgesia y el tratamiento de la fiebre. No posee la acción antiinflamatoria que sí tiene el ibuprofeno, ahí radica su principal diferencia.
El hecho de usar uno u otro va a depender de la sintomatología y del origen que provoque estas afecciones.
Formas farmacéuticas del ibuprofeno
El ibuprofeno se encuentra comercializado en multitud de formas farmacéuticas:
Formas farmacéuticas del paracetamol
En cambio, el paracetamol se encuentra en las siguientes formas:
En cambio, a diferencia del ibuprofeno, nunca lo vamos a encontrar en el formato de crema tópica para aplicar en el músculo ya que no posee la acción antiinflamatoria, como hemos indicado anteriormente.
Cómo mejorar el efecto del ibuprofeno
La industria farmacéutica se reinventa para mejorar la absorción de los medicamentos y en lo que respecta al ibuprofeno, existen sobres a los que se le añade una sal de Arginina o Lisina que hace que su efecto sea muy rápido.
También existen comprimidos de liberación sostenida que hacen que el medicamento se vaya liberando de forma progresiva para que no haya picos de dolor y que la posología sea más cómoda.
Precauciones en el uso del ibuprofeno
En ambos medicamentos debemos tener precauciones en cuanto a su uso.
En lo que respecta al ibuprofeno se debe de utilizar la mínima dosis efectiva, que dependerá de la patología que se vaya a tratar.
La dosis se individualizará en función del peso en niños. En adultos la dosis suele ser 400 mg cada 6-8 horas, no debiendo superar los 1200 mg al día.
El efecto adverso más reseñable y conocido es su potencial daño gastrointestinal, ya que puede provocar úlceras en tratamientos largos. Por eso siempre aconsejamos la toma de ibuprofeno junto con alimentos y el menor tiempo posible.
Precauciones en el uso del paracetamol
Con el paracetamol también se calcula la dosis en función del peso en la población pediátrica. En los adultos se toman 650 mg cada 6-8 horas, con precaución de no administrar más de 3 g/diarios debido al posible riesgo de daño hepático, ya que su metabolización es a través del hígado.
¿Por qué faltan medicamentos en las farmacias?
Tanto el ibuprofeno como el paracetamol se puede dispensar sin receta, pero en dosis más bajas y en formatos de menor número de comprimidos o sobres para evitar la automedicación.
En lo que respecta a los jarabes infantiles, también se venden sin receta, aunque hay otros formatos que pueden ser financiados por la seguridad social.
Este año las farmacias estamos teniendo un desabastecimiento enorme de muchos medicamentos, entre ellos el Ibuprofeno de 40 mg/ml en jarabe. Esto se debe a que los costes de producción se han incrementado (subida de la luz, la gasolina…) y al tener el precio marcado por el Estado, no sale rentable la comercialización en España y se redirige el abastecimiento a otros países.