Fotoprotector oral: ¿realmente sirve?

Durante los meses de verano, nuestra preocupación por la protección solar aumenta, puesto que cualquier despiste nos puede provocar una incómoda quemadura que nos acompañe durante un par de días -por no hablar de los efectos que esta nos puede provocar en la piel a largo plazo: envejecimiento, manchas y cáncer-.

Es por eso que estamos abiertos a incluir a nuestra rutina diaria cualquier tipo de mecanismo que nos pueda ayudar a mantenernos a salvo de las radicaciones ultravioleta. En los últimos años, se han hecho más conocidos los fotoprotectores orales, un suplemento alimenticio que ayuda a la protección solar tópica, pero que en ningún caso la sustituye.

Para saber más sobre su funcionamiento y cómo debemos usarlos, hemos entrevistado al Doctor Gustavo Garriga Martina, dermatólogo, (@gustavogarriga.com_ en Instagram).

¿Qué es la fotoprotección oral?

La fotoprotección oral es un suplemento alimenticio que se utiliza para complementar la fotoprotección clásica en crema. Está formado por diferentes antioxidantes que permiten reforzar la protección solar que usamos en crema.

¿Cómo funciona?

De entre todos estos antioxidantes, el más conocido es el extracto de Polypodium leucotomos, un helecho que crece en zonas de América central y del sur.

Cuando el sol impacta sobre nuestra piel genera lo que se conoce como daño oxidativo, formando radicales libres. Estos radicales libres son capaces de dañar las estructuras que se encuentran en nuestra piel, tales como el ADN de nuestras células (favoreciendo la aparición de cáncer de piel) o nuestras fibras de colágeno y elastina (degradándolas y generando la aparición de arrugas y flacidez).

El uso de antioxidantes orales permite minimizar este efecto negativo neutralizando los radicales libres que genera la radiación solar.

¿Cómo recomiendas usarlo?

Lo más habitual es utilizar este tipo de suplemento durante los meses de mayor radiación solar, empezando uno o dos meses antes del inicio del verano para así ir preparando nuestra piel de cara al sol.

¿Es realmente útil?

Sí, puede ayudar en personas que tengan una especialsensibilidad al sol, como en enfermedades como urticaria solar, erupción lumínica polimorfa, lupus cutáneo o dermatomiositis, entre otros.

También es muy interesante en personas de fototipo bajo, es decir, personas con la piel y los ojos claros, ya que tienen una mayor susceptibilidad a padecer quemaduras solares y acumular daño solar.

Asimismo, es interesante en personas que padezcan de manchas de melasma, ya que esta fotoprotección oral puede ser un plus que proteja a nuestra piel de la pigmentación.

¿Para quién no se recomienda?

En general, para aquellas personas más morenas de piel que tengan una cierta protección natural frente al sol con fototipos altos o que no padezcan este tipo de patologías dermatológicas que favorecen una sensibilidad solar.

Si nos decidimos a probarlo, ¿cómo lo elegimos?

Existen muchas opciones de fotoprotección oral, pero especialmente me gusta Heliocare 360 D plus, ya que además de contener antioxidantes como el extracto de Polypodium leucotomos, también nos aporta un extra de vitamina D que nos viene muy bien, ya que actualmente la mayor parte de la población sufre déficit de esta vitamina.

Su contenido en niacinamida también es muy interesante, ya que esta vitamina ha demostrado conferir un extra de protección frente al desarrollo de cáncer de piel.

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