PRUEBA PILOTO
Durante el experimento, se realizaron diferentes encuestas a los trabajadores de las empresas participantes para entender cómo les estaba afectando la reducción de la jornada, tanto a nivel personal como a nivel laboral.
A raíz de la pandemia, muchas empresas decidieron cambiar sus métodos de trabajo, apostando por el teletrabajo y combinándolo con la presencialidad en las oficinas. Otra de las ideas que aún se encuentra en fase experimental es la reducción de la jornada laboral de cinco a cuatro días, de 40 a 32 horas.
Precisamente, para comprobar las implicaciones de este modelo, la Universidad de Cambridge, en colaboración con expertos de la Boston College y la organización dedicada a la investigación, Autonomy; impulsaron en 2022 una prueba piloto en Reino Unido para evaluar la nueva jornada laboral.
Un total de 61 compañías se unieron al ensayo, agrupando 2.900 trabajadores. Durante seis meses -de junio a diciembre- este número de empleados solo trabajó cuatro días a la semana, percibiendo el mismo salario de siempre. Ahora, hemos conocido los resultados, unos que constatan que este cambio podría ser muy beneficioso, tanto para la salud de los trabajadores como para la situación de la empresa.
Las ventajas de una jornada laboral de 4 días
Reducción del agotamiento y del estrés laboral
Del total de empleados que experimentaron la reducción de jornada, al menos un 71% de ellos afirman que su agotamiento se redujo durante el periodo de prueba. Unido a este dato, un 39% también indicó que su nivel de estrés se suavizó, teniendo en cuenta la situación mental en la que se encontraban al inicio del experimento. Eso trajo consigo una reducción del nivel de ansiedad, fatiga e incluso problemas de sueño.
Menor número de bajas
Así mismo, las bajas por enfermedad en estas empresas cayeron hasta un 65%. Y, por lo que respecta a las personas que decidieron dejar su puesto de trabajo, el porcentaje se redujo un 57%.
Conciliación familiar más fácil
Además de la mejora en la salud física y mental, los beneficios también se plasman en la vida personal de los trabajadores. El 60% ha constatado que un día libre extra a la semana les facilita poder mantener un equilibrio entre el trabajo y las responsabilidades familiares.
Además, a un 62% les ha resultado más sencillo compaginar el empleo con la vida social, ya que disfrutaban de más tiempo libre durante el fin de semana al poder realizar algunas tareas domésticas el día extra, como la compra.
Más rendimiento e incremento de los beneficios empresariales
Al inicio de la prueba, muchos dudaron de que esta reducción fuera positiva para la productividad de los trabajadores. Sin embargo, el experto Brendan Burchell de la Universidad de Cambridge afirmó que: "Los trabajadores estaban mucho menos dispuestos a perder el tiempo y buscaban activamente tecnologías que mejoraran su productividad".
Además, el estudio revela que en la mayoría de las empresas participantes, los objetivos de productividad se han mantenido. También han visto que los ingresos se han mantenido similares o incluso aumentado hasta un 1,4% de media.
¿Cuál es el futuro de la jornada laboral?
Han sido tan positivos los resultados para estas organizaciones que 56 de las 61 empresas participantes -un 92%- quieren mantener la semana laboral de cuatro días. De este total, 18 quieren hacerlo de forma permanente. Por ello, reducir las horas de trabajo un 20% podría convertirse en una realidad futura.
En España también se está probando este modelo. El pasado enero, se puso en marcha una prueba piloto impulsada por el Ministerio de Industria, en la que se destinarán hasta 150.000 euros en ayudas a aquellas pymes que reduzcan la jornada laboral un 10% durante al menos dos años, sin modificar el salario de sus empleados.