CUIDA DE TU MASCOTA
Aunque a algunos humanos nos encante el miedo y la adrenalina que nos produce, los perros no disfrutan tanto de esta sensación, por lo que hay que tener en cuenta qué cosas les dan miedo para evitar su sufrimiento. Un estudio de Rover.com ha analizado sus terrores más comunes.
Con Halloween a la vuelta de la esquina, las temáticas terroríficas inundan nuestro día a día: películas de miedo, túneles del terror, disfraces de brujas, esqueletos, zombies… Y es que a muchos humanos nos encanta la adrenalina que nos produce el miedo. No obstante, no ocurre lo mismo con las mascotas, que lo pasan realmente mal a diario, con una serie de cosas que para nosotros son de lo más comunes.
Rover.com, el mayor marketplace en línea del mundo para el cuidado de mascotas, realizó una encuesta a una muestra de 1.000 personas con perros para comprender mejor los miedos y temores que afectan a las mascotas. Los resultados revelaron una serie de miedos comunes que afectan a los canes, y algunos de ellos pueden sorprenderte.
Según el estudio, el 59% de las personas encuestados afirma que los fuegos artificiales son la principal fuente de miedo para sus peludos. La razón detrás de esto se relaciona con la gran sensibilidad auditiva de los perros. Los sonidos fuertes y repentinos generados por los fuegos artificiales se perciben a un volumen mucho mayor en los canes que en los humanos, lo que los hace sentirse extremadamente incómodos y asustados.
En temporadas de festividades, es importante que quienes tengan mascotas sean conscientes de cómo pueden reaccionar a los ruidos de fuegos artificiales y tomen medidas para garantizar su tranquilidad.
Si bien los fuegos artificiales son una preocupación estacional, los miedos más usuales de los perros a menudo provienen de objetos y situaciones cotidianas en sus hogares. El estudio de Rover.com encontró que el 36% de las mascotas temen a la aspiradora, el 18% al timbre de la puerta, el 17% a la batidora y el 14% a la fregona. Estos miedos pueden parecer sorprendentes para algunos, pero es esencial comprender que la percepción de los animales es diferente a la nuestra y que situaciones aparentemente normales pueden resultar amenazantes para ellos y hacerles pasar un mal rato.
Cuando los perros se enfrentan a situaciones aterradoras, muestran una variedad de comportamientos que reflejan su sensibilidad. El 47% tiende a huir o esconderse en busca de refugio cuando experimentan miedo. Esto se relaciona con su instinto natural de defensa. El 36% de los canes, por otro lado, elige ladrar de forma incontrolada como respuesta al temor, mientras que un 25% recurre al quejido o lloriqueo para expresar su incomodidad y buscar consuelo en su dueño.
La presencia del dueño desempeña un papel crucial en la respuesta de un can al miedo. El 63% de los dueños encuestados afirmó que sus peludos no se asustan cuando están presentes, y el 54% considera que la mejor manera de tranquilizar a sus mascotas es a través de muestras de afecto, como un abrazo. Esto subraya la importancia de brindar apoyo y consuelo a nuestras mascotas cuando se enfrentan a situaciones aterradoras.
El estudio también destacó que el 48% de los dueños encuestados creen que sus mascotas son más sensibles que sus hijos pequeños, lo que sugiere que los canes pueden asustarse con mayor facilidad que los niños. Además, el 43% afirma que su mejor amigo de 4 patas se vuelve más temeroso a medida que envejecen, lo que indicaría una posible relación entre la madurez canina y la susceptibilidad al miedo.
El estudio también arrojó luz sobre otros aspectos interesantes de la relación entre perros y humanos. Cerca del 50% de encuestados dicen que sus peludos sienten aversión por el veterinario, mientras que el 25% tampoco son fanáticos de los repartidores.
"Pero no hay que olvidar que a muchos humanos les pasa lo mismo con los perros, sienten miedo en su presencia", recuerda Rover.com. En este sentido, el 58% de los propietarios creen que es porque no están familiarizados con su presencia y el 54% señala que tienen miedo de los animales debido a una experiencia negativa en algún momento de su vida.
Según el estudio, las 10 razas de perros más propensas a experimentar miedos son: