DE LO MÁS CARIÑOSOS
Enrique Ponce y Ana Soria han sido cazados de lo más románticos disfrutando de una jornada en alta mar sobre un barco en Almería. Y es que si se especulaba sobre que estaban en crisis, aquí está la prueba de que están en su mejor momento.
El pasado mes de junio, Enrique Ponce anunciaba su retirada de los ruedos de forma completamente inesperada. Una noticia que el diestro comunicaba por sorpresa a través de su página web: "Lo primero que quiero deciros es GRACIAS por vuestro cariño y apoyo incondicional, en especial durante este último año de pandemia en el que decidí defender la tauromaquia, tirar para adelante y devolverle al mundo del toro lo mucho que me ha dado", rezaba el anuncio con el que el exmarido de Paloma Cuevas confirmaba este "alto en el camino" cuando la temporada taurina acababa de comenzar.
Hace un año aproximadamente, se comunicaba que Enrique Ponce y Paloma Cuevas se separaban después de veinte años juntos y dos hijas en común. Pocos días después, se conocía que el torero mantenía una relación con una joven llamada Ana Soria. Y ahora, el exmatrimonio está a punto de firmar el divorcio.
Este miércoles, Paloma Cuevas sorprendía rompiendo su silencio en la portada de ¡Hola!, según la publicación, el acuerdo es inminente y, como no podía ser de otra manera, se producirá en términos amistosos, ya que gracias a la buena disposición y a la generosidad de la empresaria, se ha logrado de manera satisfactoria el reparto de los bienes que el matrimonio tenía en común.
Un acuerdo con el que diestro estaría muy feliz, ya que tras firmar el divorcio, podría pasar de nuevo por el altar junto a su Ana Soria, con quien vive el momento más dulce de su relación una vez olvidados los rumores de ruptura que les han perseguido en las últimas semanas.
Y es que si hace semanas se especulaba con la posibilidad de una crisis entre la pareja, Enrique y Ana que se muestran cada vez más enamorados y cómplices, disfrutan de unos días de relax en Almería, tierra natal de la joven estudiante de Derecho, donde la pareja ha instalado su residencia y donde viven su amor al margen del foco mediático en el que tan a disgusto se sienten.
La pareja ha sido grababa mientras disfrutaba de una jornada en alta mar donde se han sido pillados de lo más cariñosos cuando pensaban que nadie les estaba observando. Ponce y Ana, más enamorados que nunca, nos han regalado unas románticas y apasionadas escenas que demuestran que viven el momento más dulce de su historia de amor cuando están a punto de celebrar su primer aniversario oficial como pareja y que, tras la retirada de los ruedos del torero, viven uno de los veranos más relajados y especiales de sus vidas, ya que el pasado verano se convirtieron en dos de los objetivos más buscados por la prensa.
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