PLATOS SENCILLOS DE ASIA
Explora la cocina asiática en casa con recetas fáciles y deliciosas. Desde arroz frito chino, Pad Thai tailandés o sushi casero, aprende a preparar estos platos emblemáticos que combinan sabores únicos y técnicas sencillas.
La cocina asiática es conocida por su diversidad, combinaciones vibrantes y técnicas de cocción únicas. Desde el sushi japonés hasta el curri tailandés, los platos asiáticos ofrecen una amplia gama de sabores que pueden ser disfrutados en la comodidad de tu hogar. A continuación, te presentamos algunas recetas de cocina asiática que son perfectas para preparar en casa.
El arroz frito es un clásico de la cocina china que es sorprendentemente fácil de hacer en casa. Para prepararlo, necesitas arroz cocido y frío, ya que el arroz frío es ideal para evitar que se vuelva pegajoso al freírlo.
Ingredientes:
Modo de preparación:
1. Calienta el aceite vegetal en una sartén grande o wok a fuego medio-alto. Añade el ajo picado y sofríe hasta que esté dorado.
2. Agrega los guisantes y zanahorias, cocinando por unos minutos hasta que estén tiernos.
3. Empuja las verduras a un lado de la sartén y rompe los huevos en el espacio libre. Revuelve los huevos hasta que estén completamente cocidos.
4. Añade el arroz frío a la sartén y mezcla bien con las verduras, la cebolla picada y los huevos.
5. Vierte la salsa de soja y el aceite de sésamo sobre el arroz. Cocina todo junto, revolviendo con frecuencia, hasta que el arroz esté bien caliente y sazonado.
El Pad Thai es un plato tailandés popular que combina fideos de arroz con una sabrosa salsa agridulce, vegetales y, opcionalmente, gambas o pollo.
Ingredientes:
Modo de preparación:
1. Cocina los fideos de arroz según las instrucciones del paquete y escúrrelos.
2. Calienta el aceite de cacahuate en un wok o sartén grande a fuego medio-alto. Añade el ajo picado y cocina.
3. Incorpora los camarones pelados (o pollo) y cocina hasta que estén bien cocidos.
4. Empuja los camarones a un lado y rompe el huevo en el espacio libre. Revuelve hasta que esté cocido y bien mezclado con los camarones.
5. Añade los fideos cocidos, brotes de soja y zanahoria rallada a la sartén. Mezcla bien.
6. En un tazón pequeño, combina la salsa de pescado, el azúcar de palma y la pasta de tamarindo. Vierte esta mezcla sobre los fideos y mezcla bien.
7. Sirve caliente, adornado con cacahuetes picados y rodajas de limón.
El sushi puede parecer complicado, pero con un poco de práctica, puedes prepararlo fácilmente en casa. Solo necesitas algunos ingredientes básicos y una esterilla para enrollar sushi.
Ingredientes:
Modo de preparación:
1. Coloca una hoja de alga nori en una esterilla para sushi forrada con film transparente.
2. Humedece tus manos con agua para evitar que el arroz se adhiera. Extiende una capa delgada de arroz cocido y enfriado sobre el nori, dejando un borde de 2 cm en la parte superior.
3. Coloca tiras de salmón, pepino y aguacate en el centro del arroz.
4. Enrolla el sushi usando la esterilla, presionando ligeramente para formar un cilindro apretado.
5. Corta el rollo en piezas de 2 cm usando un cuchillo afilado y húmedo.
6. Sirve con salsa de soja, wasabi y jengibre encurtido.
El curri japonés es un plato que se diferencia de otros curris asiáticos por su sabor suave y ligeramente dulce.
Ingredientes:
Modo de preparación:
1. Calienta el aceite en una olla grande a fuego medio. Añade la cebolla picada y cocina hasta que esté dorada y transparente.
2. Agrega el ajo y el jengibre picados, y cocina por un minuto más hasta que liberen su aroma.
3. Incorpora el pollo cortado en trozos y cocina hasta que esté dorado por todos lados.
4. Añade las zanahorias peladas y cortadas en rodajas y las patatas en cubos a la olla. Cocina por unos minutos, revolviendo ocasionalmente.
5. Vierte el caldo de pollo en la olla, llevando la mezcla a ebullición. Reduce el fuego y cocina a fuego lento durante unos 20 minutos, o hasta que las verduras estén tiernas y el pollo esté cocido.
6. Desmenuza el bloque de curri japonés y agrégalo a la olla. Remueve bien hasta que el curri se disuelva por completo y la salsa espese.
7. Cocina a fuego lento durante unos 5-10 minutos adicionales, ajustando la sal si es necesario.
8. Sirve el curri caliente sobre arroz blanco cocido.
Las gyozas son una deliciosa y versátil opción que puedes preparar en casa con facilidad. Con una combinación de carne, pescados o vegetales y una técnica de cocción que combina fritura y vapor, estas empanadillas son perfectas como aperitivo o plato principal.
Ingredientes:
Modo de preparación:
1. Para preparar el relleno, calienta en una sartén grande una cucharada de aceite vegetal a fuego medio.
2. Añade las setas picadas y cocina durante unos 3-4 minutos hasta que estén tiernas. Agrega la col china picada y cocina por otros 2 minutos, removiendo frecuentemente. Retira del fuego y deja enfriar.
3. En un bol grande, mezcla la carne de cerdo picada con el jengibre rallado, la salsa de soja y el aceite de sésamo. Añade la mezcla de setas y col ya enfriada. Revuelve bien para combinar todos los ingredientes. Reserva.
4. Coloca las obleas de gyozas en una superficie limpia y añade una pequeña cucharada de relleno en el centro de cada oblea.
5. Moja los bordes de la oblea con un poco de agua utilizando tu dedo o un pincel de cocina. Doble la oblea por la mitad para cubrir el relleno. Presiona los bordes para sellarla bien. Si deseas, puedes hacer pequeños pliegues en el borde para asegurar un buen sellado.
6. Calienta 2-3 cucharadas de aceite vegetal en una sartén grande a fuego medio-alto y coloca las gyozas en la sartén, asegurándote de no sobrecargarla. Cocina las gyozas durante 2-3 minutos o hasta que la base esté dorada y crujiente.
7. Añade 1/4 taza de agua a la sartén y cubre inmediatamente con una tapa. Cocina al vapor durante unos 5-7 minutos, o hasta que el agua se haya evaporado casi por completo y las gyozas estén bien cocidas.
8. Retira la tapa y deja que las gyozas se frían un poco más para que la base quede crujiente.
9. Para hacer la salsa, en un pequeño bol, mezcla la salsa de soja, el vinagre de arroz y el aceite de sésamo. Añade una guindilla picada si prefieres un toque picante. Revuelve bien y sirve.