SEGUNDA VIDA

Ideas para reutilizar los desodorantes roll-on cuando se acaban

El desodorante roll-on es un imprescindible en nuestro neceser, siempre y cuando tenga contenido suficiente como para poder cumplir con su función: eliminar el olor de la axila provocado por el sudor. Una vez se agota, se convierte en un envase aparentemente inservible. ¿Qué usos podemos darle al bote vacío?

Según indica el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, desechamos alrededor de 400 millones de toneladas de plástico al año, un material que a día de hoy contamina increíblemente los océanos, afectando a su flora y fauna y, de rebote, a nuestra propia alimentación.

Además, es un componente que tarda ni más ni menos que entre 450 y 500 años en descomponerse, convirtiéndose en uno de los principales problemas de nuestra sociedad. Por este motivo, reciclar el plástico es fundamental.

Aunque no lo creas, con él se pueden hacer piezas para coches, ropa y hasta nuevos envases. Ese no es el único proceso en el que tenemos un papel relevante, podemos prolongar la vida de los plásticos que tenemos por casa si los reutilizamos. No solo hablamos de las botellas o las fiambreras, a todo le podemos sacar una nueva función.

4 formas de reutilizar el desodorante roll-on

En esta ocasión, los protagonistas son los desodorantes roll-on. Para cada una de las ideas que te proponemos, es fundamental que primero retires la bola del envase con la ayuda de un cuchillo -haz un poco de palanca- y laves cada uno de los componentes correctamente, para eliminar cualquier rastro de producto y prepararlo para darle una segunda vida.

Cómo crear un masajeador casero

Probablemente, este sea el mejor uso que le vas a dar al envase vacío por dos razones. La primera, prolongarás la vida del plástico y la segunda, apostarás por tu bienestar. Lo único que deberás hacer es rellenar el envase con el producto que prefieras y frotes el recipiente por la zona que quieras masajear, ejerciendo algo de presión para una mayor eficacia.

Haz tu propio desinfectante portátil

Para mantener las manos limpias, sobre todo cuando estamos fuera de casa, los productos desinfectantes y cremas higienizantes de manos son clave. Aun así, no es sencillo dosificar el contenido. Si rellenas el bote con jabón para manos, desinfectante o incluso crema hidratante, obtendrás un roll-on que te servirá para mantener tus manos impolutas con una dosis justa gracias a la dosificación de la bolita. En verano, ¡llénalo de agua fría y refréscate!

Cómo hacer rotuladores en casa

Una forma muy divertida de prolongar el uso del envase es creando un rotulador gigante para los más peques. Es muy sencillo: llena el bote con agua y un poco de pintura y mézclalo bien. Coloca de nuevo la bolita y deja que se lo pasen en grande pintando. Resulta muy cómodo de agarrar, especialmente para aquellos niños que aún no tienen la habilidad hacer pinza con los dedos.

Qué hacer con las bolas del desodorante roll-on

Y, sin duda, puedes explotar la creatividad inventándote múltiples manualidades con la bolita. Más allá de convertirse en una nueva bola con la que jugar, puedes usarlas para crear guirnaldas luminosas, llaveros o bolas para el árbol de Navidad. En definitiva, no limites su uso, pues no pesan nada y se pueden manipular fácilmente.

Hábitos para reducir el consumo de plástico

Cuanto menos plástico consumamos, menor será nuestra huella ecológica. Aunque a día de hoy aún resulta casi imposible eliminarlo de nuestra vida, hay situaciones en las que sí podemos esquivarlo.

Muchos establecimientos ya permiten a sus clientes llevar sus propios recipientes para comprar la comida, ahorrándose el uso de determinados embalajes. Aventúrate a comprar en las tiendas a granel y llévate siempre una bolsa de tela o reutiliza una de plástico que tengas por casa para evitar seguir desperdiciando.

En la medida de lo posible, apuesta por objetos biodegradables como cepillos de dientes, productos que se descomponen antes; y usa cantimploras para rellenar el agua en lugar de comprar botellines constantemente o rellenarlos. Un uso excesivo de determinados plásticos puede ser perjudicial para nuestro organismo.