Unicef detecta redes de trata en España que amenazan ya a menores ucranianos

Se ha cumplido un mes desde el inicio de la invasión rusa y, desde entonces, no cesa la partida de ucranianos hacia España en busca de asilo y de una nueva vida. Hoy mismo han llegado a Madrid un grupo de 137 ucranianos, en su mayoría madres e hijos. Según los datos del gobierno, se estima que ya han aterrizado en España alrededor de 25.000 refugiados.

Algunos han sido traídos por medio de organizaciones voluntarias oficiales y otros a través de familiares o amigos que se encuentran ya en el país. Por ello, no se tiene constancia de muchos de los migrantes, advierten las ONGs.

Al mismo tiempo, una oleada de solidaridad ha provocado que voluntarios de todas las comunidades autónomas vayan a recoger en sus coches particulares o en autobuses a las víctimas de la guerra que quieren huir. Esta acción altruista no puede realizarse sin una regulación, recuerdan las ONGs, ya que exponen a los menores y mujeres a un mayor riesgo de trata y de explotación sexual.

"En estas situaciones críticas siempre se producen estos intentos de reclutamiento, por parte de redes y mafias, de niñas y mujeres, especialmente, que son las más vulnerables. Desde Unicef hemos detectado algunos de estos movimientos en la frontera y, al parecer, en España", ha afirmado el Presidente de Unicef España, Gustavo Suárez Pertierra, para Antena 3 Noticias.

Según nos ha relatado, los voluntarios de Unicef en los lugares fronterizos han avistado casos de individuos y coches que tratan de eludir la vigilancia de las autoridades y llevarse a las familias sin registrarlas. "Niños que viajan solos, que vienen de una situación terrible y son más vulnerables", apunta el presidente.

Es importante seguir estos pasos

Es por ello que, desde la agencia de Naciones Unidas, alertan de la importancia de seguir los siguientes pasos:

• Ofrecer la mayor cantidad de información posible a los implicados
• Que las personas desplazadas hasta nuestro país lleguen a través de los cauces oficiales
• Que se les registre y haya un gran control gubernamental.

"Lo más importante es que, sean cuales sean las líneas por las que llegan estas personas, sean redirigidas hacia los centros de acogida oficiales para que puedan atenderles, registrarles y distribuirles", destaca Pertierra.

Este es el mensaje principal que quieren transmitir las ONGs, la necesidad de poder gestionar e identificar la cantidad de flujos de personas que llegan desde muy diversos cauces y vías para reducir o evitar el riesgo de trata infantil y explotación sexual.