Patologías 2.0
Aumentan las patologías relacionadas con el uso de internet y de dispositivos móviles en niños y adolescentes, una práctica cada vez más común que afecta a salud física y psicológica de los más pequeños.
El uso sin control y abusivo de internet o de dispositivos móviles, tablets u ordenadores no solo es un hábito frecuente en los adultos, sino que también forma parte de la vida de los más pequeños. Es una práctica muy extendida entre nuestra sociedad que conlleva consecuencias tanto físicas como sociales o psicológicas para la salud.
Son las conocidas como patologías 2.0 o tecnopatologías y que, tal y como afirma la psicóloga y coordinadora de Aitta Psicología Infanto Juvenil, Ainhoa Uribe, "son síntomas o comportamientos que observamos con bastante frecuencia". Se trata de enfermedades cada vez más presentes en consultas de Atención Primaria y en consultas psicológicas.
Esta convivencia excesiva con dispositivos tecnológicos conlleva a patologías cada vez más comunes entre los pacientes más pequeños como "el aislamiento y, por lo tanto, la escasa relación con sus iguales; además de conductas de riesgo como contacto con gente desconocida", afirma la experta.
El problema más grave viene cuando estas situaciones llegan a frenar o impedir el desarrollo de una vida normal y, por lo tanto, traen consecuencias físicas o psicológicas para la salud. Este es el caso de las siguientes patologías:
- 'Selfifobia' o miedo a hacerse un selfie por temer no salir bien o por entender esta medida como una perdida de la intimidad. "Esta patología está relacionado con la dismorfobia, una enfermedad que se da cuando no se acepta la propia imagen personal", explica Uribe.
- 'Phubbing': prestar más atención al móvil que a la gente que nos rodea.
- 'Vamping' o uso del dispositivo tecnológico a lo largo de toda la noche, lo que repercute directamente en las horas de sueño de los más pequeños.
-'Nomofobia' o miedo irracional a quedarnos sin teléfono móvil por falta de cobertura o por no tener batería.
Para evitar la sobreexposición y el uso excesivo de estos dispositivos móviles, Ainhoa Uribe está convencida de que la solución principal es "concienciar mucho a las familias, ya que los niños empiezan a desarrollar ese uso desmedido del móvil en casa", además de tomar conciencia como sociedad de las consecuencias que un uso abusivo del móvil puede producir y poner un límite a esta práctica.