Caso Pegasus
¿Qué teléfono utiliza el presidente cántabro que consigue esquivar el software espía Pegasus?
Recientemente se ha sabido que los móviles del presidente del Gobierno y la ministra de Defensa han sido infectados con el malware Pegasus. Sin embargo, ambos políticos españoles no han sido los únicos en estar intervenidos ilegalmente. En la lista de dirigentes que han sufrido ciberespionajes similares también figuran otras personalidades como Emmanuel Macron o Charles Michel. Ante esta situación, el Supervisor Europeo de Protección de Datos (EDPS) ha reclamado la regulación y un control más férreo en el uso de este software.
Pegasus extiende sus tentáculos
"Existe constancia de que Pegasus ha sido utilizado de modo ilícito en, al menos, 20 países y que entre las víctimas de estas intervenciones se encuentran gobiernos, personalidades de la sociedad civil de distintos ámbitos, informadores, personas de distinta naturaleza", ha asegurado el ministro de Presidencia, Félix Bolaños.
No obstante, parece que hay un terminal con el que este sistema quedaría sin utilidad: el Nokia 311, en posesión de un presidente español.Este es precisamente el móvil que utiliza el dirigente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla.
El sistema antibloqueo de Revilla
¿Qué es lo que tiene su dispositivo para bloquear a Pegasus? En este caso, habría que destacar lo que no tiene, que es precisamente lo que actúa como barrera contra programas maliciosos. Es un móvil que se lanzó en 2012 y cuenta con un sistema operativo que no está actualizado.
Además, tampoco tiene acceso a internet por lo que no permite instalar aplicaciones de mensajería instantánea como WhatsApp o Telegram, susceptibles de ser hackeadas. Lo que para muchos puede ser un inconveniente, para Revilla, en este caso, es una gran ventaja. "Me han dicho que Pegasus aquí fracasa, no tienen nada que hacer en un Nokia 311", ha reconocido el cántabro.
¿Qué dispositivos utilizan otros políticos?
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, utiliza una tecnología más avanzada que la del Nokia 311. Antes de que Rusia iniciara su invasión, Estados Unidos, a través de la CIA, le facilitó un teléfono indetectable para evitar ser espiado y localizado por el Kremlin.
Precisamente en EEUU, la Administración de Biden también utiliza móviles de máxima seguridad, totalmente blindados que se autodestruyen si alguien intenta manipularlos.