DURANTE MÁS DE 10 DÍAS
En el rescate de Julen participaron más de 300 personas, entre profesionales y voluntarios. En el rescate también fue necesaria la ayuda de maquinaria pesada que trabajó sin descanso.
La perforadora encargada de hacer el túnel vertical por el que tuvieron que bajar los mineros tiene un peso de ochenta toneladas y mide 30 metros de largo. La máquina se encontraba haciendo otras labores en Madrid pero tuvo que dejarlas para el rescate, debido a su gran tamaño fue trasladada en dos camiones.
La máquina es capaz de hacer una prospección de entre 60 y 70 metros y con un diámetro suficiente para que puedan bajar los mineros. Una vez se superaron los problemas con la perforación del pozo, fue el turno de la encamisar.Los tubos que recorrían el interior se hicieron a medida y tenían un diámetro de un metro con diez centímetros.
Las máquinas trabajaron contrarreloj para adecuar el terreno a la bajada de los mineros, para ellos no había descanso. Una vez estuvo listo el túnel, fue el turno de los ocho experimentados mineros que no dudaron en jugarse la vida.