Gestación subrogada
En España la gestación subrogada es ilegal por lo que las parejas españolas tienen que recurrir a agencias que ofrecen este servicio en el extranjero.
En España la gestación subrogada es una práctica ilegal por la Ley 14/2006. Es por eso que las parejas españolas tienen que recurrir a agencias que ofrecen servicios de gestación subrogada en el extranjero. Pero... ¿qué es lo que ofrecen este tipo de agencias?
Lo primero que hacen las parejas cuando llegan a las agencias de gestación subrogada de España es informarse. Allí les ofrecen el catálogo de los países en los que está disponible este servicio, así como la situación legal de cada uno de ellos. También se les informa de la diferencia de precio entre unos y otros, pues la situación cambia bastante dependiendo del lugar.
El siguiente paso es el de elegir el programa y iniciar el proceso en sí. En determinadas ocasiones incluso pueden escoger tanto a la madre gestante como las características del donante de esperma.
El tercer paso es el relacionado con todos los trámites legales y burocráticos. Así, una vez que ha nacido el bebé, desde la agencia les ayudan a realizar todos los trámites legales para inscribir al pequeño. Un proceso que llevan a cabo de la mano de un abogado para estar seguro de que todo sea correcto desde el punto de vista legal.
Algunas agencias incluso van más allá e incluyen diferentes tipos de seguros. Por ejemplo, una de estas empresas se compromete a reiniciar todo el proceso en el caso de que el bebé fallezca durante sus dos primeros años de vida. "Reinicio del mismo programa que había contratado, hasta dos años después del nacimiento, en caso de fallecimiento del bebé por cualquier motivo o causa", explican.
Raquel es uno de esos casos de españolas que acaban de hacer realidad su sueño. Y es que, tras 14 embarazos fallidos, decidió recurrir a la gestación subrogada. "La llegada de Irene supuso que yo tuviera ganas de vivir de nuevo", confiesa.
Se puso en contacto con una agencia especializada en España y eligió el tipo de subrogación. En su caso eligió el gestacional, es decir, ella misma aportó material genético. "Fabricaron los embriones y se solicitó la ayuda de la mamá gestante", explica Raquel. A esta gestante se le somete a exhaustivos exámenes médicos y psicológicos y que no tiene por qué ser del mismo estado.
También se puede elegir el género del bebé. Esto ocurre en Estados Unidos, aunque no en los modelos de gestación subrogada altruistas.