Zamora
El hombre disparó al camarero porque se negó a servir alcohol al autor del disparo porque el negocio de hostelería estaba ya cerrado a esa hora.
Un camarero ha resultado gravemente herido esta madrugada por arma de fuego en un restaurante de Zamora, tras negarse a servir alcohol a un cliente, quien posteriormente se refugió bajo un puente de vías de tren y se enfrentó a la Policía, resultando abatido tras un intercambio de disparos.
El altercado tuvo lugar alrededor de la 1:40 de la madrugada de este sábado en la calle Villalpando de Zamora, cuando el individuo, un hombre de 61 años conocido por su afición al tiro deportivo, realizó tres disparos desde el exterior del establecimiento después de que se le negara el servicio de alcohol debido al cierre del local. Uno de los disparos alcanzó al camarero, quien sufrió heridas graves, incluyendo dos costillas rotas y daños en el pulmón.
Según testigos presenciales, el agresor, quien portaba un arma de fuego y abundante munición, realizó los disparos tras ser rechazado en su intento de ser atendido a través de una ventana de servicio al público. Luego, cruzó la calle hacia un puente de vías del tren, donde se atrincheró y se enfrentó a cuatro agentes de la Policía Municipal con disparos, siendo abatido por estos tras ser herido en las piernas.
El camarero herido fue trasladado al hospital Virgen de la Concha de Zamora y posteriormente al complejo hospitalario de Salamanca, donde fue intervenido quirúrgicamente. Por su parte, el agresor, cuya identidad no ha sido revelada, portaba consigo un cinturón con dos cargadores y munición, mostrando un claro perfil de tirador experto.
La bala le entró por la espalda y salió limpia por el pecho, y en su camino le rompió dos costillas y afectó al pulmón. El hombre fue abatido y trasladado al Hospital Virgen de la Concha en estado grave. No cuenta con antecedentes, pero tiene experiencia en tiro deportivo y tendría acceso a armas, según han detallado fuentes de la Concejalía de Protección Ciudadana de Zamora.
La investigación del suceso está a cargo de las autoridades policiales, quienes recibieron el aviso por la presencia armada en el bar y actuaron rápidamente para contener la situación.
El horario permitido para servir alcohol en bares y establecimientos similares varía según la normativa de cada país, estado o región. En España, por ejemplo, el horario de cierre de los establecimientos de hostelería y restauración está regulado por las autoridades locales, pero generalmente se sitúa entre la 1:00 a.m. y las 3:00 a.m., dependiendo de la comunidad autónoma y las restricciones específicas vigentes en cada momento. Sin embargo, es importante verificar las regulaciones locales específicas, ya que pueden variar según el lugar y las circunstancias.
Si un establecimiento de hostelería o restauración vende alcohol fuera del horario permitido establecido por las autoridades locales, puede enfrentarse a diversas consecuencias legales y administrativas.
Las autoridades competentes pueden imponer multas económicas al establecimiento por incumplir la normativa sobre horarios de venta de alcohol. En casos graves o reiterados de infracción, el establecimiento puede ser clausurado temporalmente por las autoridades, lo que implica la suspensión de su actividad comercial durante un período determinado.
En situaciones extremas, las autoridades pueden revocar la licencia de funcionamiento del establecimiento, lo que implica su cierre definitivo.
En algunos casos, los responsables del establecimiento, como el propietario o el gerente, pueden enfrentarse a acciones legales y ser procesados penalmente por violar la normativa vigente.
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