Exclusión social
Es una de las conclusiones del informe 'Evolución de la cohesión social y consecuencias de la covid-19 en España' elaborado por la Fundación FOESSA y presentado este martes por Cáritas.
La pandemia ha golpeado a toda la sociedad española pero, como suele ocurrir, se ha cebado con los más débiles: once millones de personas están en situación de exclusión social. De ellos 2,7 millones son jóvenes de entre 16 y 34 años, la mitad en exclusión severa.
Es una de las conclusiones que muestra el informe "Evolución de la cohesión social y consecuencias de la covid-19 en España" elaborado por la Fundación FOESSA y presentado este martes por Cáritas para alertar de que la sociedad española está ante una situación muy complicada a raíz de la irrupción del coronavirus.
Aumento de la desigualdad
En 2021 se sumaron más de 650.000 nuevas personas jóvenes, de 16 a 34 años, a la exclusión, la mayoría en situación severa, lo que supone 500.000 más con respecto a 2018 y elevan a un total de 1,4 millones de jóvenes en situación de exclusión severa.
"Cada crisis aumenta la desigualdad y el impacto de esta ha sido grave y severo", ha subrayado la secretaria general de Cáritas Española, Natalia Peiro, que ha detallado que de los once millones de personas que ha dejado la pandemia en exclusión social, seis millones ya en situación de pobreza severa, lo que supone 2,5 millones más que en 2018 y la cifra más elevada registrada en España desde 2007.
Precariedad laboral
Según la investigación, a partir de una encuesta a 7.000 hogares, la precariedad laboral durante la crisis sanitaria se ha duplicado y alcanza a casi 2 millones de hogares que dependen económicamente de una persona sustentadora principal que sufre inestabilidad laboral grave.
Durante la crisis, esta situación ha alcanzado a 800.000 familias y el desempleo total familiar, casi se ha duplicado, es decir hay casi dos millones de hogares donde todas las personas activas están en paro, ha explicado el coordinador del Equipo de Estudios de Cáritas y secretario técnico de FOESSA, Raúl Flores.
Pese al aumento de la protección social, ha advertido Flores, no se ha logrado compensar esta situación y un tercio de estos hogares, 600.000 en concreto, carece de algún tipo de ingreso periódico.
Brecha digital y de género
Además, la pandemia ha destapado un nuevo factor de exclusión social: la desconexión digital, "el nuevo analfabetismo del siglo XXI", ha subrayado Flores, que también ha alertado del aumento de la brecha de género ya que esta crisis ha tenido más impacto en sectores más feminizados, como el comercio o la hostelería.