EN LIBERTAD TRAS PRESTAR DECLARACIÓN
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía investigan por sendos delitos de odio y de lesiones a dos jóvenes de 23 y 24 años de edad, con domicilio en Sanxenxo y Vigo, que supuestamente agredieron en plena calle a un joven hasta dejarle inconsciente por haber participado en una manifestación a favor de la unidad de España. Ambos jóvenes fueron detenidos a finales de año en días distintos; y una vez que declararon en comisaría, donde no reconocieron los hechos, fueron puestos en libertad al tener domicilio conocido y al entender que no reincidirán. Tras ello, será el Juzgado de Instrucción número tres de Vigo el que les cite a declarar.
Estas mismas fuentes han destacado que esta es una investigación "compleja", si bien se consiguió identificar y detener a dos de los cuatro autores de los hechos, y, a falta de ponerles nombre y apellidos, ya se conoce quiénes son los otros dos por imágenes, con lo que la Policía espera que su detención se produzca "pronto".
En cuanto a la víctima, que precisó de varios días de hospitalización por las lesiones sufridas, estas fuentes han trasladado que no pudo presentar la denuncia inmediatamente y tuvo que hacer el trámite un familiar. Así, fue días más tarde cuando compareció para dar su versión de los hechos.
Según ha informado el Cuerpo Nacional de Policía, los hechos ocurrieron a las 6,00 horas del pasado 10 de diciembre en la calle Inés Pérez de Zeta, cuando unos jóvenes se acercaron a otro grupo de chicos y, sin mediar palabra, agredieron a uno de ellos --de 21 años-- y a un segundo, que consiguió zafarse. La víctima quedó inconsciente al recibir numerosos golpes, hasta que huyeron los agresores al aparecer la Policía Local, alertada por uno de los amigos de la víctima.
Los agentes avisaron entonces al 061, y una ambulancia trasladó al herido al Hospital Alvaro Cunqueiro con varias piezas dentales rotas y múltiples contusiones. La Policía Nacional ha apuntado que la agresión se motivó en que la víctima participó a finales de septiembre en una manifestación en Barcelona a favor de la unidad de España. Su foto apareció al día siguiente en la portada de un periódico británico y desde entonces empezó a sufrir amenazas por redes sociales por parte de desconocidos, aunque no lo denunció al creer que no iría a más.
A raíz de estos hechos, los investigadores determinaron que los responsables de lo ocurrido son cuatro jóvenes, dos de los cuales son los detenidos y otros dos que se intenta identificar, y que alguno de ellos es cercano a grupos radicales.