Narcotráfico
La Guardia Civil, en colaboración con la Gendarmería marroquí, han desarticulado una organización criminal y detenido a nueve de sus integrantes por realizar 'narcovuelos' con helicópteros para introducir hachís en España desde Marruecos.
La colaboración de España y Marruecos ha conseguido desarticular una organización dedicada al narcotráfico de hachís. Introducían la droga con helicópteros desde Marruecos a España. Entre los detenidos hay dos pilotos expertos en vuelos nocturnos y a baja altura.
La operación denominada 'Torcal 469 Tornado' se inició a mediados del 2023 a raíz del seguimiento de un miembro de la organización dedicado al tráfico internacional de hachís. Los investigadores averiguaron que la organización estaba buscando pilotos para realizar 'narcovuelos' entre España y Marruecos.
Tras varios meses de investigación los agentes confirmaron que la organización tenía dos helicópteros ocultos, uno en una finca de la provincia de Sevilla y otro en Cádiz. Ambas fincas eran usadas por el líder de la organización para el tráfico de drogas.
En la madrugada del 15 de enero los investigadores detectaron un 'narcovuelo' en la provincia de Cádiz con rumbo hacia el sur desde la finca de la organización. Observaron que el helicóptero volaba a una altura muy baja y sin luces. Por este motivo, se activó un dispositivo conjunto de la Guardia Civil y la Gendarmería Real Marroquí para hacer el seguimiento.
Detectaron que el helicóptero entró en el espacio aéreo marroquí durante unos minutos. Después lo detectaron de nuevo rumbo a España.
Un helicóptero de la Guardia Civil consiguió interceptar la aeronave en el aire cuando aterrizaba en una finca situada en la localidad gaditana de Chiclana de la Frontera. En ese momento detuvieron a cinco de los integrantes de la organización delictiva, entre ellos el piloto.
El helicóptero transportaba una carga de 30 fardos de arpillera de hachís con un peso en total de 795 kilogramos. En el interior también se incautaron varios dispositivos de navegación y terminales móviles. Y en la finca tres vehículos usados por la organización.
Uno de los máximos responsables de la banda de narcotraficantes sufrió un accidente de tráfico y falleció en una zona próxima a la de la incautación del helicóptero. Se sospecha que huyó del lugar con un vehículo a gran velocidad.
En la siguiente fase de la investigación se realizaron cuatro entradas y registros, se detuvo a cuatro personas más de la organización y se incautó un segundo helicóptero en una finca de la localidad sevillana de Utrera. Esta segunda aeronave estaba siendo acondicionada para poder realizar los 'narcovuelos'.
La organización estaba organizada y jerarquizada de manera que cada miembro tenía una misión. Unos conseguían los helicópteros, otros las naves para ocultarlos y fincas desde donde iniciar los vuelos. Mientras otros contrataban a los pilotos y a los mecánicos para realizar el mantenimiento y puesta a punto de los helicópteros.
Los helicópteros fueron adquiridos en el este de Europa, teniendo capacidad para varios pasajeros, aunque los narcotraficantes quitaron los asientos traseros para transportar mayor cantidad de droga, pudiendo llegar a cargar cantidades cercanas a los 900 kilogramos de hachís. El valor de mercado de este tipo de aeronaves en el marcado negro rondaría los 900.000 euros.
La investigación ha sido llevada a cabo por agentes de la Guardia Civil y la Gendarmería Real Marroquí. Unidades de Policía Judicial de Málaga y Cádiz y el Centro Regional de Análisis e Inteligencia contra el Narcotráfico (CRAIN).
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