Ayudas DANA
El edificio, con una inversión de más de 2 millones de euros, ofrece soluciones para familias que perdieron sus hogares en la riada.
La Generalitat Valenciana, a través de la Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo, ha comenzado a entregar las primeras 21 viviendas del edificio de La Torre, en Valencia, a familias afectadas por las inundaciones del pasado 29 de octubre. Esta iniciativa forma parte de un esfuerzo por garantizar un alojamiento digno y rápido para los damnificados mientras se recuperan del impacto de la DANA.
El edificio de La Torre, financiado parcialmente por el programa europeo Next Generation, alcanza una inversión total cercana a los 23,5 millones de euros. De estos, 8,5 millones han sido aportados por fondos europeos y 15 millones por la Generalitat.
El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, junto a la vicepresidenta Susana Camarero, visitaron el complejo de 184 viviendas, cuyas zonas comunes y bajos resultaron dañados por las inundaciones. Los trabajos de reacondicionamiento, que han supuesto una inversión superior a los 2 millones de euros, han permitido que estas viviendas se entreguen totalmente equipadas y sin coste alguno durante un periodo inicial de seis meses.
Mazón ha explicado que, cuando pase el tiempo estipulado, se evaluará la situación de cada familia. En caso de necesitar el inmueble, estas pasarán a un régimen de alquiler social. Las primeras 21 viviendas ya han sido adjudicadas a familias de municipios como Aldaia, Alfafar, Catarroja, Massanassa, Picanya y Torrent, mientras el resto del edificio se habilitará progresivamente. "Estas 184 viviendas estaban destinadas inicialmente al alquiler asequible, pero la emergencia habitacional obligó a priorizar a las personas afectadas por las riadas", ha señalado Mazón.
Las viviendas, de entre 48 y 89 metros cuadrados, tienen entre uno y tres dormitorios, y están adaptadas a cualquier condición climática. Además, incluyen plaza de garaje y una terraza cubierta. El edificio, compuesto por dos volúmenes de 21 y 15 plantas, dispone de una terraza comunitaria y un local de uso colectivo en su cuarta planta.
Para acceder a estas viviendas, los beneficiarios deben cumplir algunos criterios como ser residentes en zonas afectadas por las inundaciones, haber perdido su vivienda habitual o requerir reparaciones estructurales que superen los seis meses y no superar ingresos de 4,5 veces el IPREM.
Además de los realojos, la Generalitat ha puesto en marcha ayudas directas al alquiler, con un importe máximo de 11.200 euros por beneficiario. Estas subvenciones cubren hasta 12 mensualidades de 800 euros, incluyendo fianza y garantía, y ya se han tramitado 611 solicitudes por un valor total de 6,84 millones de euros.
Carlos Mazón también ha aprovechado la ocasión para criticar la falta de implicación del Gobierno central, señalando que aún no se han puesto a disposición todas las viviendas disponibles. También ha agradecido a las empresas privadas que han colaborado en el acondicionamiento y mobiliario de las viviendas, así como a la Conselleria por gestionar esta emergencia habitacional.
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