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Han pasado cuatro meses desde el terrible suceso que conmocionó a Ourense y la investigación continúa.
Ocurrió el 26 de octubre, un joven de 15 años falleció, y otro resultó herido, por la caída de un tabique de su centro de estudios. La investigación se puso en marcha ese mismo día para tratar de esclarecer las causas que provocaron que ese muro se fuese abajo.
Se ordenó un informe técnico sobre el tabique y se constataron defectos en la construcción y el diseño previo, pero la familia de la víctima quiere ir ahora más allá.
A través de su abogado, Jorge Temes, solicitan nuevos informes del proyecto de construcción, la identidad de la empresa diseñadora de la obra y de la ejecutora, los nombres de los profesionales que dirigieron la construcción y de los responsables de Educación que la validaron. Además, han pedido al centro documentación que pudiera existir sobre el tabique en cuestión.
La familia busca probar qué es lo que pudo fallar para que una estructura cayese y, sin querer hablar de negligencia todavía, pretenden llegar al fondo del asunto.
Inicialmente se descartó que hubiesen existido errores estructurales en la pared y se señalaba a una fuerza que habría provocado la caída, pero la familia quiere conocer todos los detalles del derrumbe y saber si cumplía con todas las medidas de seguridad pertinentes.