Bebé Basurto
La mujer ha reconocido los hechos y ha quedado en libertad provisional sin medidas cautelares.
La familia de Aimar, el recién nacido que fue raptado esta semana en el hospital de Basurto, en Bilbao, va a pedir una orden de alejamiento para que la secuestradora no se pueda acercar a ellos. Este sábado, el juez que instruye el caso la dejó en libertad provisional. La mujer ha reconocido los hechos en su comparecencia ante y ha solicitado su ingreso voluntario en un centro psiquiátrico.
El padre del bebé secuestrado asegura que tienen miedo de que la mujer pueda volver a intentarlo y desconfían de una decisión judicial, que no entienden. "Es una vergüenza que puedas hacer un delito y estés en la calle a las 72 horas", ha señalado. El padre ha apuntado que no debería estar en la calle: "Que no esté en la calle, una cárcel o un centro psiquiátrico".
En su auto, la jueza señala que existen "indicios fundados" de la comisión de un delito de detención ilegal (secuestro), por el que continuará el procedimiento de instrucción en el juzgado que corresponda. La jueza no aprecia razones que hagan necesaria una medida cautelar de prisión provisional, dado que, según considera, no existe riesgo de fuga, al residir la joven en el barrio de Santutxu (Bilbao) en un "entorno estable", ni riesgo de destrucción de pruebas, puesto que ha admitido los hechos y se han obtenido las pruebas de la comisión del delito.
La investigación del caso ha comprobado que la detenida ha estado internada en la unidad psiquiátrica de un hospital vasco en los últimos meses. Fue allí donde comenzó a pensar en hacerse con un bebé, y a lo largo del verano difundió en su entorno que estaba embarazada y que iba a dar a luz el 19 de octubre, la fecha en la que se llevó al pequeño del hospital.
Así fue el secuestro
Los hechos tuvieron lugar sobre las nueve de la noche del miércoles cuando la arrestada entró en el centro vestida de sanitaria, se movió por Maternidad y abrió varias puertas de habitaciones "aparentemente con intención de secuestrar a algún recién nacido". Finalmente se llevó a uno de los bebés tras indicar como justificación que le tenía que practicar la prueba del talón y se dio a la fuga con el niño.
A las 8:30 horas de este jueves, los agentes recibieron el aviso de que la mujer había dejado al bebé en perfecto estado en el felpudo de una vivienda ubicada en el octavo piso de la plaza del Carmen, en Santutxu.
Unas dos horas después, la secuestradora fue detenida en la plaza Azoka del barrio de Zorroza "en estado de agitación" y fue trasladada a la comisaría de la Ertzaintza de Deusto.