Monjas de Burgos
Las monjas de Burgos están bajo la tutela de este hombre que se denomina como 'Duque Imperial'.
El 'falso obispo'Pablo de Rojas es uno de los principales personajes en todo este revuelo sobre las monjas de Belorado. Ellas ahora están bajo su tutela y su corriente. Niega al Vaticano y al papa. Para él, el último pontífice fue Pío XII. Borja Agudo, fotógrafo, entró en la casa de Pablo de Rojas para un reportaje y realizó varias fotografías del lugar. Señala que era como "pasar del 2008 a 1950". Agudo se quedó en aquel momento "flipando".
Ese es uno de los pisos que tendría en un edificio del centro de Bilbao, declarado de interés cultural. Además el 'falso obispo' tiene más sedes dentro y fuera de nuestro país: un seminario en Vizcaya, un palecete en un pequeño pueblo de Palencia y otro centro en Sao Paulo, en Brasil. "Nos recibió la doncella. Era un poco extraño, pero bueno. Nada más pasar la puerta era como atravesar un portal temporal. De pasar del 2008 a 1950. La decoración de la casa era antigua. Había un montón de figuritas. Yo hice mi reportaje. Fui a lo mío, estaba flipando", ha relatado Borja Agudo.
La forma de caminar y postura de Pablo de Rojas son para "guardar relación con el poder y la majestad de Dios". Es amante de la ostentosidad, que se ve reflejada en su indumentaria eclesiástica propia de los años 50. Se presenta como 'Duque Imperial', 'Príncipe Elector del Sacro Imperio Romano' y cinco veces 'Grande de España'. En 200, fundó en Bilbao la Pía Unión de San Pablo Apóstol, que se define como la verdadera Iglesia de Cristo.
En aquella casa a la que entró el fotógrafo en Bilbao era una de las más caras de la ciudad. Allí vivía una "doncella y un pariente que estaba como de mayordomo". Un piso de 200 metros cuadrados. "Tenía montada una casa increíble. Ahí habría dinero", comenta el fotógrafo. Tenía un "Montón de figuritas en la vitrina y una cantidad de ornamentos en la casa".
La noticia de la ruptura de las monjas clarisas de Belorado con El Vaticano ha generado polémica en los últimos días por distintos motivos. Es la primera vez que unas clarisas españolas se enfrentan a Roma, a la que acusan de "persecución" por una trama inmobiliaria. Faltan todavía muchas piezas de este rompecabezas, porque solo sabemos que la Santa Sede ha rechazado la petición de las monjas de vender su monasterio de Derio para adquirir el de Orduña.
"Nos van a denominar herejes y cismáticas, locas y muchas cosas más, muy calumniosas y desagradables. No los creáis, al menos por esta vez, que no os engañen", señala una parte del comunicado de 72 páginas que lanzaron por redes sociales este martes.
En un vídeo publicado en Instagram, la madre abadesa Sor Isabel de la Trinidad detalló que irán dando más datos de las "preocupaciones que están surgiendo", aunque en cualquier caso aclara que su "realidad" no tiene nada que ver con un secuestro ni nada parecido. "Iremos compartiendo con vosotros, poco a poco, nuestra experiencia, nuestro deseo de ser fieles a la verdad de Cristo que hemos recibido, a la fidelidad a la fe, a la doctrina de la Iglesia Católica", anunciaba.
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