Bilbao
Tras no encontrar las joyas en la zona del suceso, los agentes sospecharon que podía habérselas tragado puesto que tosió en varias ocasiones.
El joven de 18 años detenido por la Policía Local de Basauri por el robo con violencia de una medalla y una cadena de oro a una mujer de 72 años tuvo que ser ingresado después de haberse tragado el botín, que se le había quedado en la tráquea, suponiendo gran riesgo para su salud.
Así fue el robo
El robo tuvo lugar cuando una mujer paseaba junto a su perro por la calle Ibaigane de Basauri. Inmediatamente, la mujer llamó a la Policía Local para comunicar que había sido víctima de un robo mediante el método 'del tirón' por el que le quitaron dichas joyas.
Gracias a que proporcionó una detallada descripción del autor, los agentes de investigación y patrullas de protección ciudadana que se desplazaron a la zona le localizaron en las inmediaciones de la estación de tren de la calle Eleuterio Villaverde, tras centrar sus sospechas en él al verle corriendo hacia la estación.
Le interceptaron y fue la propia víctima quien le reconoció, de manera que fue detenido por un presunto delito de robo con violencia, siendo trasladado a comisaría.
Se tragó el botín
Aunque buscaron las joyas sustraídas en la zona del suceso tras comprobar que el detenido no las llevaba encima, los agentes se fijaron en que había tosido en varias ocasiones nada más ser detenido, por lo que sospecharon de que se hubiera tragado las joyas.
Una vez comunicado al Juzgado de guardia de Bilbao, se solicitó una orden para una inspección médica del joven y someterle a las pruebas necesarias para comprobar si era cierto lo que pensaban. Pruebas que confirmaron que las joyas habían quedado alojadas en la tráquea del detenido, por lo que fue necesario intervenirle de urgencia.
Se le trasladó al hospital de Basurto en una ambulancia medicalizada y escoltada por una patrulla de la Policía Local de Basauri, donde estuvo ingresado hasta que el servicio médico consiguió extraerle con éxito la medalla y la cadena. Tras ello, se le dio el alta y se le trasladó a los calabozos de la Policía Local de Basauri, donde se realizaron las diligencias para ser puesto a disposición del juzgado de guardia.