Erupción volcánica de La Palma de 2021
Los animales, un grupo de podencos, se encuentran desde hace semanas aislados por la lava del volcán Cumbre Vieja de La Palma. Estaba previsto que este miércoles comenzase su rescate, pero las cámaras no consiguen localizarlos.
Es un gran misterio ¿dónde están los perros atrapados por la lava del volcán de La Palma? Este jueves harán un nuevo barrido para ver si los encuentran y pueden rescatarlos. La única imagen que hay de los animales es en la que aparecen corriendo en un estanque, pero ya no se encuentran ahí.
Las altas temperaturas provocadas por la erupción volcánica en La Palma dificultan que las cámaras térmicas detecten a los animales, incluso impiden sobrevolar el terreno sobre las 22:00 h. El dron lleva incorporado además un altavoz para llamar a los perros, pero de momento no hay respuesta.
Muchos se preguntan cuánto podrán aguantar estos podencos sin alimento, sin ayuda, y además han querido aclarar que los supuestos dueños de los animales no se han puesto en contacto con ellos. En estos momentos, insisten en que están centrados en sobrevolar día y noche la zona para rescatar a los que ya se conocen como los perros de La Palma.
Se ignora cuántos son -algunas versiones citan cuatro animales, otras hablan de seis, apunta Efe- y ni siquiera las personas que intentan rescatarlos conocen a quién pertenecen, pero casi todos sospechan cuál es su contexto. Son podencos, perros de caza.
Rescate frustrado
Este miércoles era el momento marcado para que la firma Aerocamaras probara si puede sacarlos de allí con sus drones de transporte, como asegura. Y ha podido hacer una prueba esperanzadora: desplazar sobre ese terreno una carga de 15 kilos durante 1.200 metros (supuestamente tendrán que volar 500 metros de y ida y otros 500 de vuelta), con un tercio sobrante de batería.
Sin embargo, ha surgido un problema inesperado: los perros no están, o al menos los drones no los ven, ni siquiera con cámaras térmicas. Porque, con los cerca de 30 grados que había este mediodía en el sur de La Palma, si uno de los podencos estaba refugiado a la sombra de un arbusto o de cualquier elemento que haya sobrevivido a las cenizas, su huella térmica no se distingue de la de una piedra.
Difíles de localizar a causa del calor
"Con nuestras cámaras podemos distinguir la cara de los perros a 300 o 400 metros, pero es verdad que pueden estar escondidos entre matorrales y en otros muchos sitios. Esto hace que con el calor sean más difíciles de localizar", ha explicado el consejero delegado de Arocámaras, Jaime Pereira, a los periodistas que aguardaban el resultado de la búsqueda en Los Charcos, en el último control de tráfico antes de entrar en la zona de exclusión.
Ni la empresa, ni el colectivo animalista que ha impulsado la operación, Leales.org, tiran la toalla. Seguirán buscando mañana jueves por la mañana. Incluso por la noche, si les dejan, ha precisado Pereira.
Mientras tanto, los drones siguen sobrevolando la zona cercada por las coladas de lava del volcán de La Palma reproduciendo sonidos que deberían atraer a los podencos, suponiendo que ya estén acostumbrados a esos pequeños helicópteros que les han proporcionado comida durante días.