Asteroide
En 2007, la NASA concluyó dos formas para desviar un asteroide en un informe presentado al congreso de los Estados Unidos. Aquí te explicamos como.
La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA por sus siglas en inglés) enviará una aeronave para que choque contra el asteroide 'Demorphos' para intentar así reducir su velocidad y, eventualmente, cambiar su órbita y rotación.
Esta operación valdrá para que en caso de que un asteroide choque contra la tierra saber como actuar.
¿Cómo se desvía un asteroide?
La mayoría de los científicos creen que nunca es demasiado temprano para considerar estrategias para desviar un asteroide que se dirija directo hacia nosotros, dado que la posibilidad está ahí.
En 2007, la NASA concluyó en un informe presentado al congreso de los Estados Unidos que en el caso de que un asteroide se dirigiera hacia la Tierra, la forma más efectiva de desviarlo sería lanzar una bomba nuclear al espacio.
La fuerza de su detonación destruiría el asteroide, aunque como resultado el planeta tendría que lidiar con cualquier efecto nuclear. De hecho, el uso de armas nucleares para mitigar los impactos de asteroides sigue siendo un tema controvertido y muy discutido en la comunidad de organismos encargados de velar por la defensa planetaria.
La segunda mejor opción consistía en enviar un "impactador cinético", es decir, una nave espacial, cohete u otro proyectil que, si se apunta en la dirección correcta y con la velocidad adecuada, debería colisionar con el asteroide, transferir una fracción de su impulso, y sacarlo fuera de su trayectoria hacia la Tierra. "El principio básico de la física es como jugar al billar", explica Sung Wook Paek, autor principal de un estudio en la revista especializada Acta Astronautica.
53 años detectando asteroides
Los radares de la NASA llevan 53 años detectando asteroides que amenazan impactar contra nuestro planeta. Hasta el momento, desde que se tienen registros, 1.000 meteoritos han pasado cerca la Tierra, casi 19 al año de media. Pero a pesar de estos datos, nuestra capacidad de reacción es prácticamente nula.