Canarias
El vertido ha llegado a varias playas de Telde que han cerrado al baño.
El Gobierno de Canarias ha activado la emergencia de nivel 2 del Plan Territorial de Emergencias de Protección Civil (PLATECA) debido al vertido de fuel oil ocurrido en el Puerto de La Luz, en Las Palmas de Gran Canaria. Este incidente se originó durante una maniobra de trasvase de combustible entre dos buques en el Muelle Virgen del Pino, lo que provocó el derrame del material fuera de las barreras de contención y su progresiva expansión hacia la costa. Hasta el momento, los municipios más afectados por el vertido son Las Palmas de Gran Canaria y Telde.
El PLATECA ya había sido activado en fase de prealerta la noche del 4 de septiembre, a las 23:06 horas, tras detectarse el inicio del incidente. Durante la madrugada, las autoridades monitorearon la evolución del vertido y, a las 9:00 horas del día siguiente, se declaró la situación de alerta ante el riesgo inminente de que el combustible llegara a las costas de la isla.
Este aumento a la fase de emergencia se decidió después de comprobar que el derrame de fuel había superado las barreras de contención y avanzaba hacia las zonas costeras.
Paralelamente, se activó el Plan Marítimo Nacional en fase de emergencia, situación 2. Desde las 10:00 de la mañana, la Dirección General de Emergencias ha coordinado diversas reuniones para analizar la situación y tomar decisiones sobre las medidas a adoptar.
Ahora trabajan en la recogida y disipación del fueloil. En tierra lo hacen las cuadrillas y en el mar diversas embarcaciones. Además, la Unidad Policial de Telde lo vigila todo desde el aire con un UNI Dron, Unidad de Intervención con Dron.
A pesar de los esfuerzos de contención realizados por la Autoridad Portuaria de Las Palmas, parte del vertido ha alcanzado ya las playas de Bocabarranco y La Restinga, en el municipio de Telde. Esta situación ha obligado al Ayuntamiento de Telde a cerrar cuatro de sus playas: La Restinga, El Barranquillo, Palos y San Borondón para evitar que los bañistas se vean afectados por la contaminación. De hecho, permanecerán cerradas durante todo el fin de semana.,
El jefe del Tráfico Marítimo de la Autoridad Portuaria, Antonio Castellano, ha informado que el vertido no supera los 3.000 litros y que, en su mayoría, fue contenido por las barreras instaladas en el puerto. No obstante, la mancha de fuel que se ha desplazado fuera de las instalaciones portuarias cubre una extensión de dos kilómetros de longitud y 400 metros de anchura. Aunque esta mancha solo afecta entre un 20 y un 40% de la superficie marina, su impacto en el litoral es preocupante.
Castellano también señaló que el espesor de la película de fuel es inferior a una micra (una milésima parte de un milímetro) y que no se trata de "galletas de combustible", sino de una capa muy fina que, con las condiciones meteorológicas y los trabajos de dispersión, podría diluirse entre el jueves y el viernes.
En respuesta al incidente, la planta desaladora situada en el sur de Las Palmas de Gran Canaria ha tomado medidas de precaución, aunque hasta el momento no ha resultado afectada por el vertido. Tanto la Capitanía Marítima como la Autoridad Portuaria de Las Palmas han activado los protocolos de emergencia correspondientes, en colaboración con el Plan Marítimo Nacional y el PLATECA, para mitigar los efectos del derrame.
Las autoridades continúan trabajando para limpiar las aguas afectadas y se espera que las labores de recuperación en el puerto se completen en un plazo de 48 a 72 horas. Sin embargo, debido a las condiciones del mar y la cantidad de combustible derramado, las tareas de limpieza podrían extenderse, complicando aún más la situación en la costa de Telde y Las Palmas.
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