Afectados por el Prestige se vuelcan con La Palma devolviendo la ayuda recibida durante la marea negra

Hace ya 19 años de la catástrofe del Prestige, pero a los que la vivieron en primera persona no se les olvida. “Ver esos pabellones llenos de gente en La Palma, me recordó a aquel momento en el que aquí los pabellones se llenaron con todos los voluntarios que vinieron a ayudar a limpiar la costa”. El que habla es Roberto Vidal, patrón mayor de Corme, en A Costa da Morte, A Coruña.

Él, percebeiro de profesión, sintió la impotencia de ver como su mar, su medio de vida y, sobre todo, su gran pasión, se teñía de negro. Igual que ahora lo están viendo cientos de personas afectadas por la erupción del volcán de Cumbre Vieja. “La catástrofe no tiene nada que ver, son cosas distintas, pero pensé que algo teníamos que hacer, igual que en aquel momento el resto de España lo hizo por nosotros”.

La Cofradía no lo dudó. Se pusieron manos a la obra, contactaron con asociaciones y compañeros de toda la comarca y empezaron a recoger productos para mandarlos a la isla lo antes posible. “La respuesta de la gente fue tremenda. Ya enviamos 1.500 kilos entre ropa y productos de todo tipo. Ahora ya dejamos de recoger ropa y estamos recogiendo productos de higiene, limpieza y productos de primera necesidad, ya tenemos otros 1.500 kilos casi para enviar”.

Desde Corme organizan la logística de una iniciativa que ya ha llegado al resto de ayuntamientos afectados por la marea negra que llenó la costa gallega de chapapote, pero también de solidaridad y apoyo. Malpica, Laxe, Camariñas, Carballo… Todos los ayuntamientos cercanos han habilitado puntos de recogida para que los ciudadanos aporten lo que puedan. Ellos lo revisan y preparan el envío.

También organizan los productos recibidos desde Protección Civil de Carballo. Ropa de cama, toallas, material necesario para la asistencia. Los voluntarios de esta agrupación trabajan para que sus compañeros en La Palma dispongan de los medios necesarios para desarrollar su trabajo.