Texas
El niño se está recuperando de las heridas después de que el coche se estrellara contra contra el local y acabara encajonado en la barbería, donde se encontraban 25 personas.
El terrible incidente ocurrió en Houston, Texas, cuando un coche se estrelló contra la barbería 32 Degreez, ubicada en la avenida Westheimer, dejando a un niño de 11 años gravemente herido.
El incidente ocurrió alrededor de las 12:20 horas, cuando un hombre de 61 años, al intentar retroceder de un espacio de estacionamiento, accidentalmente mantuvo el pie en el acelerador. Esto provocó que el vehículo chocara contra la pared exterior y quedara encajonado en la pared interior del local, donde había unas 25 personas en ese momento.
El coche primero golpeó otro vehículo antes de atravesar la pared exterior de la barbería, llevándose por delante todo lo que encontró a su paso. Chez Robertson, uno de los barberos que estaba trabajando, relató que el coché le rozó mientras corría dentro del local. "Me rozó la pierna porque estaba corriendo, pero mi principal preocupación era el niño al que estaba a punto de cortarle el pelo", explicó Robertson.
El vehículo, al atravesar la barbería, golpeó al niño de 11 años que estaba esperando su turno. Robertson, en un reflejo rápido, vio al niño levantando la mano sobre el coche, lo que le permitió rescatarlo y sacarlo de debajo del vehículo. "Lo arrastró a través de la pared, así que fue una experiencia muy traumática", contó el barbero.
El niño fue trasladado al hospital con lesiones graves, y su madre informó a Robertson que su hijo necesitaría una cirugía. A pesar de la gravedad de la situación, su pronóstico es favorable y se está recuperando.
El conductor del coche, que también resultó herido, fue trasladado al hospital. Aunque su estado se desconoce, la policía de Houston indicó que será responsable del accidente. El incidente sigue siendo investigado, pero se ha aclarado que fue un accidente y no un acto intencional.
Por otro lado, Darrick Brown, dueño de la barbería, expresó su tristeza por los daños en su negocio, pero sobre todo su preocupación por el bienestar del niño. "No estoy molesto, pero sí decepcionado", dijo Brown. A pesar de los daños, su principal prioridad es la recuperación del niño: "Podemos reconstruir el local, eso no es un problema. Pero por ese niño, estoy rezando por él".
Aunque la barbería quedó afectada, Brown está decidido a seguir adelante. "Lo importante es levantarnos y seguir trabajando, el negocio debe continuar", comentó el dueño, quien planea arreglar los daños y reabrir tan pronto como sea posible.
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