Diagnóstico fallido
La familia de Zadie Ajetunmobi denuncia la negligencia médica en la detección de una infección mortal, asegurando que su muerte podría haberse evitado si se hubiera proporcionado el tratamiento adecuado a tiempo.
Zadie Ajetunmobi, una niña de tres años, falleció en noviembre de 2022, tan solo diez horas después de haber sido llevada de urgencia al hospital Broomfield en Chelmsford, Essex. Sus padres, Theo y Rhiannon Ajetunmobi, están devastados por la pérdida de su hija y denuncian que los médicos no supieron reconocer los síntomas de una infección potencialmente mortal: la sepsis.
La pequeña Zadie fue llevada al hospital con fiebre alta, pero los médicos que la atendieron inicialmente no detectaron la gravedad de su estado. Horas después, Zadie sufrió un paro cardíaco y falleció. Solo dos meses más tarde, a través de los resultados de la autopsia, sus padres supieron que la causa de la muerte fue la sepsis, una condición que, de haber sido diagnosticada y tratada correctamente, podría haber tenido un desenlace diferente según The Daily Mail.
"Zadie era una niña sana, llena de vida", dijo su padre, Theo. "No se mencionó la sepsis en ningún momento, y después de su muerte nos quedamos en una especie de limbo, sin saber qué había pasado realmente". Sus declaraciones, llenas de dolor, reflejan la incertidumbre y el desconcierto con el que tuvieron que lidiar tras perder a su hija en tan poco tiempo.
La familia alega que los médicos fallaron en reconocer los síntomas de sepsis durante la primera visita a urgencias. Tres díasantes de su fallecimiento, Zadie había sido diagnosticada con amigdalitis por un médico fuera de horario, y fue enviada a casa con antibióticos. Sin embargo, su condición empeoró rápidamente, lo que obligó a su madre a llevarla de nuevo al hospital. Lamentablemente, a pesar de la intervención médica, fue demasiado tarde para salvar su vida.
Este lunes se llevará a cabo una investigación para analizar el tratamiento que recibió Zadie y las políticas de detección de sepsis del hospital. Este proceso buscará esclarecer los posibles errores médicos y mejorar los protocolos de actuación para evitar que tragedias similares vuelvan a ocurrir en el futuro.
La sepsis es una respuesta inflamatoria del cuerpo a una infección grave que puede provocar fallos en múltiples órganos y, si no se trata de inmediato, la muerte. La detección precoz y el tratamiento rápido con antibióticos son fundamentales para salvar vidas. En el caso de Zadie, su familia sostiene que el personal médico no actuó con la celeridad necesaria ni reconoció los signos de la enfermedad, lo que resultó fatal.
Tras la muerte de Zadie, la familia ha rendido un emotivo homenaje a su hija. "Nunca olvidaremos su hermosa sonrisa y su naturaleza alegre", expresaron en un comunicado. "Que descanse en luz perpetua mientras mantenemos su recuerdo cerca de nuestros corazones". La pérdida de Zadie ha generado un gran impacto en la comunidad, y muchos se han unido al dolor de sus padres, expresando su solidaridad y exigiendo respuestas claras sobre lo ocurrido.
Diane Sarkar, directora de enfermería y calidad de la Mid and South Essex NHS Foundation Trust, expresó sus condolencias a la familia y afirmó que el hospital ha tomado medidas para mejorar los procesos de atención y diagnóstico, en un esfuerzo por evitar que tragedias como esta se repitan. "Hemos actuado para asegurar que se implementen mejores procedimientos", señaló.
A nivel nacional, la muerte de Zadie ha reavivado el debate sobre la importancia de la formación médica continua en la detección de sepsis, especialmente en niños pequeños, quienes a menudo no presentan los síntomas de manera tan evidente como los adultos. Organizaciones benéficas y de apoyo a las víctimas de sepsis han reiterado la necesidad de que tanto el público como los profesionales de la salud estén mejor informados sobre los signos de alerta de esta condición mortal.
Cada año, la sepsis afecta a miles de personas en el Reino Unido, y aunque los avances médicos han mejorado las tasas de supervivencia, la falta de un diagnóstico temprano sigue siendo un problema persistente. Mientras tanto, la familia Ajetunmobi continúa buscando justicia para su hija, con la esperanza de que su caso sirva como un llamado de atención a todo el sistema sanitario.
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