Reino Unido
La Casa Real de la Moneda de Reino Unido desvela cómo serán las nuevas monedas del país. El rostro del rey Carlos III estará en ellas, aunque las de Isabel II continuarán teniendo validez.
Reino Unido concluye este viernes un mes inolvidable para su historia, tras numerosos días de luto en homenaje a la que fue su reina durante 70 años, Isabel II. Con su muerte, el otrora príncipe Carlos de Inglaterra ya es el nuevo monarca, oficialmente el rey Carlos III. Y, siendo ya el nuevo monarca, empiezan los cambios en la simbología del país, también en las monedas que circulan a lo largo de todo Reino Unido, y que llevarán su rostro.
Este viernes, la Casa Real de la Moneda británica ha desvelado cómo serán las nuevas monedas que lucirán el rostro del rey Carlos III. El monarca aparecerá con el rostro mirando hacia el lado izquierdo, a diferencia de su madre, que, en las monedas, salía mirando hacia el lado derecho. No es la única novedad que ha traído consigo la Casa Real de la Moneda de Reino Unido, que ha comunicado el cercano lanzamiento de una moneda conmemorativa.
Según indica la propia Casa Real de la Moneda británica en su página web, "el 3 de octubre de 2022 , tenemos el honor de lanzar una colección especial de monedas conmemorativas para conmemorar este momento conmovedor de la historia británica. Con uno de los tres diseños de reverso, cada nueva moneda de la colección presenta el retrato oficial acuñado del rey Carlos III. La moneda británica de 50 peniques también entrará en circulación general".
El fin de un sueño en Reino Unido
La muerte de Isabel II ha cerrado una historia legendaria en Reino Unido, tras morir la mujer que ascendió al trono en el año 1952, y se mantuvo en él hasta el día de su muerte. La reina falleció tan solo un año y medio después que su marido, el duque de Edimburgo, quien perdió la vida el 9 de abril de 2021, tras hacérsele una operación de corazón varios días antes, y cuando le quedaban tan solo dos meses para cumplir 100 años de vida.
Este pasado jueves, el Palacio de Buckingham dio a conocer que la reina falleció debido a "su avanzada edad" (tenía 96 años). No obstante, los británicos han quedado algo escépticos respecto a este comunicado, dado que son las mismas palabras que se usaron con el duque de Edimburgo, y, en el caso de Isabel II, fue notable la mancha morada que se vio en su mano durante su encuentro con Liz Truss dos días antes de fallecer, lo cual ha desatado los rumores sobre una posible enfermedad o alguna otra causa del fallecimiento no comunicada por ahora.