TRAS UNA DISPUTA
Unos 300 residentes de la ciudad turca de Torbali han atacado un campamento de tiendas de campañas donde se alojan refugiados sirios, obligándoles a huir, informa la emisora CNNTürk.
Según esta fuente, el ataque se produjo este sábado después de que la noche del viernes estallara una pelea cuando una familia turca denunció que uno de sus miembros, un menor, había sido golpeado por sirios. En esa reyerta, en la que se usaron armas blancas, resultaron heridas 30 personas.
Durante la mañana del sábado, unas 300 personas, armadas con cuchillos y palos, atacaron el campamento donde viven unos 500 sirios, que escaparon del lugar. Según CNNTürk, los vecinos turcos destruyeron las tiendas de campaña donde se alojan los sirios, que trabajan como temporeros en la zona.
Turquía acoge ya a 3,5 millones de refugiados, la gran mayoría de Siria. Ankara no da estatus de refugiado a los sirios sino que los considera "huéspedes": no tienen residencia legal ni pueden obtener un empleo oficialmente, pero no se les expulsa ni se impide que trabajen de manera irregular en la agricultura, talleres o fábricas.