Borrell
Borrell se reunió en Macedonia del Norte con el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, y el primer ministro de Kosovo, Albin Kurti.
El Alto Representante comunitario de Política Exterior, Josep Borrell, ha anunciado un pacto entre Serbia y Kosovo para ir implementando "de buena fe" la propuesta de la Unión Europea sobre una normalización de las relaciones entre los dos países, pero no se ha firmado ningún acuerdo. Borrell se reunió en la localidad de Ohrid, en Macedonia del Norte, con el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, y el primer ministro de Kosovo, Albin Kurti, para realizar una hoja de ruta para la aplicación del plan europeo.
"Se han comprometido a respetar todos los artículos del acuerdo"
Kosovo y Serbia "se han comprometido plenamente a respetar todos los artículos del acuerdo y a implementarlos de buena fe", dijo Borrell después de una reunión que duró 12 horas.
Ese pacto tiene previsto que Belgrado y Pristina reconozcan los documentos oficiales de ambos países, de manera que los ciudadanos puedan viajar de manera libre entre uno y otro, y que Serbia no impida la entrada de Kosovo en organismos internacionales. "Se trata de ver cómo se implementa el acuerdo, de los pasos prácticos, de quién los da y cómo. Dicen que el diablo está en los detalles, y a veces el diablo está en el calendario", dijo Borrell.
No es una negociación fácil
Admitió que no era una negociación fácil, a la vez que señalaba que "uno no se reúne doce horas para algo sencillo" y que la propuesta original de la UE había sido "más ambiciosa".
A su vez, anunció que Kosovo se había comprometido a lanzar "de inmediato" negociaciones con la UE para ceder un "nivel apropiado de gestión autónoma" a la comunidad serbia en el país. Sin embargo, no hay un acuerdo firmado ya que Kosovo "carece de flexibilidad" y Serbia "se ha negado a firmar nada por una cuestión de principios", aunque está dispuesta a implementar el acuerdo.