Irán
Miles de iraníes han protestado en varias ciudades de Irán para clamar venganza por la muerte del líder de Hezbolá, Hasán Nasrala.
Un subcomandante de la Guardia Revolucionaria iraní ha muerto en el ataque israelí contra Beirut. Israel lanzó un ataque sin precedentes contra un edificio residencial, donde se encontraba la sede central de Hezbolá. En el ataque también ha muerto el líder de Hezbolá, Hasán Nasrala.
"El general de brigada Abbas Nilfrushan murió en el ataque de Israel contra Beirut, junto con el líder de Hizbolá Hasán Nasrala", informó la agencia 'Mehr'.
Según la agencia, Nilfrushan era el subcomandante al cargo de las operaciones de la poderosa Guardia Revolucionaria, mientras que otros medios afirmaron que estaba al frente de la Fuerza Quds.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Nasser Kanaani, dijo que el ataque era un "crimen de guerra" por el que Israel y Estados Unidos tendrán que rendir cuentas. La Guardia Revolucionaria iraní es el brazo de operaciones en el extranjero creado por la revolución de 1979 para defender el sistema islámico del país.
Nilfrushan estaba sancionado por Estados Unidos desde octubre de 2022 por su papel en la represión de manifestaciones pacíficas, especialmente en la provincia de Sistán y Baluchistán.
Teherán capitanea el llamado 'Eje de la resistencia', una alianza informal antiisraelí formada además de por Hezbolá, por los palestinos de Hamás y los hutíes del Yemen, entre otros. Tras la muerte del subcomandante, Irán aseguró que continuará su camino.
Miles de iraníes han protestado en varias ciudades de Irán para clamar venganza por la muerte del líder de Hezbolá, Hasán Nasrala. Protagonizaron las marchas en la plaza Palestina de la capital iraní, con gritos de "venganza", "muerte a Israel" y "muerte a Estados Unidos" a quien responsabilizan por la muerte de Nasrala.
Los manifestantes ondearon las banderas de Irán, Palestina e Hezbolá. También se registraron manifestaciones en las ciudades de Isfahán, Kermán, Qom y Mashad. En Mashad, se ha instalado una gran bandera de luto de color negro en lo alto de la cúpula del santuario del Imán Reza, el octavo imán de los chiíes.
Irán es uno de los principales aliados de Líbano y Hezbolá, grupo al que apoya desde su fundación en los años 80 y uno de sus aliados más cercanos.
El líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, ha asegurado que "el perro rabioso sionista" es "demasiado pequeño" como para causar daños a Hezbolá. Así se ha referido a Israel. "Los criminales sionistas deberían saber que son demasiado pequeños como para causar un daño significativo a la fuerte estructura de Hezbolá en Líbano", ha indicado.
Jamenei ha acusado a Israel de "matar de nuevo a gente indefensa", lo que "revela la brutal naturaleza de los sionistas y demuestra la política corta de miras y estúpida de los líderes del régimen usurpador". "El asesinato en masa de mujeres, niños y civiles no afecta a la resistencia", ha subrayado.
Asimismo, ha recordado que Israel "ya estuvo una vez con militares de camino a Beirut" y que "fue Hezbolá quien le cortó la pierna e hizo a Líbano querido y orgulloso".
El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el contralmirante Daniel Hagari, ha advertido de que las operaciones militares contra Hezbolá no han concluido con la muerte de su líder. "Esto no ha terminado, Hezbolá tiene más capacidades", ha dicho.
Hagari ha celebrado la muerte de Nasralá y ha destacado que durante décadas ha sido "uno de los mayores enemigos de Israel de todos los tiempos". "Eliminarle ha hecho del mundo un lugar más seguro", ha recalcado.
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