Brasil
Brasil ya ha recuperado la normalidad, pero las autoridades siguen investigando para sancionar a todos los participantes de este asalto. Entre las miles de personas implicadas, el sobrino de Bolsonaro.
Dos días después del asalto al Congreso en Brasil por parte de los seguidores de Jair Bolsonaro, las autoridades brasileñas continúan trabajando para lograr identificar a todos los implicados.
Por el momento, ya son más de 1.500 las personas detenidas por este golpe que, en la tarde de este domingo, veía amenazada la democracia de Brasil durante varias horas.
Ahora, justo cuando continúan las labores de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del estado, una imagen se ha hecho viral en las redes sociales: en ella aparece el sobrino de Bolsonaro, en medio de la multitud, con una camiseta de Brasil y los ojos visiblemente rojos. Con ella, se confirma el apoyo de familiares del exmandatario brasileño a este asalto a las sedes de los tres poderes, el legislativo, el ejecutivo y el judicial.
En la publicación, compartida en su cuenta personal de Instagram, el sobrino de Bolsonaro asegura que los ojos rojos se deben al "gas lacrimógeno disparado por las fuerzas de seguridad, que no se fijaron en los puntos de destrucción y lo arrojaron a todos los manifestantes".
Bolsonaro condena la invasión
Tras él, se pueden observar a personas con mascarillas o incluso paños cubriéndose nariz y boca tras ese lanzamiento de los agentes de la Policía que intentaron frenar, tras decretar Lula da Silva la intervención federal, este golpe de la manera más rápida posible.
Por su parte, el propio Bolsonaro, a través de su cuenta oficial de Twitter, ha condenado el asalto y ha asegurado que durante su mandato siempre ha estado "dentro de las cuatro líneas de la Constitución".
"Las manifestaciones pacíficas, en forma de ley, son parte de la democracia. Sin embargo, las depredaciones e invasiones de edificios públicos como las ocurridas hoy, así como las practicadas por la izquierda en 2013 y 2017, escapan a la regla", ha sentenciado.