1.000 VUELOS SUSPENDIDOS
Se trata de la mayor huelga en la historia de la mayor compañía aérea europea, cuya dirección se ha visto desbordada por la decisión a la hora de actuar del sindicato del sector UFO, para la que la aerolínea "ha capitulado" al anular la mayoría de sus vuelos previstos, según manifestó un portavoz sindical.
Los auxiliares de vuelo de la aerolínea, colectivo integrado por 18.000 empleados, cesaron sus tareas en todos los aeropuertos en que opera Lufthansa, después de que ni sindicatos ni patronal dieran muestras de acercamiento en sus posturas respectivas. Se trata de la primera huelga de alcance nacional del personal de cabina de la primera compañía aérea alemana y se estima afectará el tráfico aéreo de todo el país y sus conexiones internacionales, tanto de esa aerolínea como de sus asociadas.
En el caso de España, se han cancelado 40 conexiones con las ciudades de Madrid, Barcelona, Bilbao y Palma de Mallorca: 14 de ellas con la capital de España, otros 14 con la capital catalana, seis enlaces con Bilbao y otros seis con Mallorca
Hora y media antes de iniciarse la huelga, el presidente de Lufthansa, Christoph Franz, calificaba ante la televisión pública ZDF de "desproporcionada" la huelga, aunque admitía que la dimensión alcanzada por el conflicto laboral había superado sus previsiones. El conflicto se produce con un momento crítico para la aerolínea, necesitada de recortar gastos para hacer frente a la competencia de las compañías de bajo coste y el alza de precios de los carburantes.
La dirección de Lufthansa optó este jueves por cancelar la mayoría de las rutas previstas para este viernes, unas 983 de las 1.781 programadas, y ofreció a los pasajeros afectados la posibilidad de viajar en tren, en caso de trayectos domésticos, o en compañías de la competencia, como Air Berlin, la segunda del país.
La red de ferrocarriles Deutsche Bahn ha reforzado sus servicios con trenes adicionales o ampliando el número de vagones, mientras que Air Berlin optará por ofrecer los mismos trayectos, pero con aparatos de mayor capacidad.
Según los planes de Lufthansa, sólo funcionarán con normalidad los 600 vuelos programados por sus filiales como Germanwings y otras compañías del grupo como Austrian Airlines o Swiss, aunque tratará de mantener sus rutas intercontinentales.