Reino Unido
El joven se ahorcó después de estrangular a su novia, una joven de 26 años, en un juego sexual.
Una investigación forense ha revelado los trágicos detalles detrás de la muerte de Georgia May Brooke, de 26 años, y Luke Cannon, de 31, quienes fueron encontrados muertos tras un juego sexual que salió mal en febrero de 2022.
Georgia Brooke, una bailarina profesional, y Luke Cannon, un entrenador personal y profesor de gimnasia, consumieron cocaína, GHB y alcohol antes de participar en una sesión de sexo que ha sido clasificado como "duro". Durante el encuentro, Cannon estranguló a Brooke hasta dejarla inconsciente, provocándole un paro cardíaco, según revela la 'BBC'.
Los médicos encontraron a Brooke desnuda y sin pulso en la cama de Cannon. Intentaron reanimarla, pero fue imposible. Finalmente, la joven fue declarada muerta más tarde en el Bradford Royal Infirmary. Tras el aviso del personal médico a la Policía, Cannon huyó del hospital y se ahorcó en una zona boscosa cercana.
El sargento detective Phil Hardwick, de la Policía de West Yorkshire, informó que Cannon estaba siendo buscado bajo sospecha de asesinato. Sin embargo, añadió que todo el sexo entre la pareja fue consensuado, apoyado por mensajes de texto que indicaban el interés de Brooke en la asfixia erótica.
El patólogo Dr. Christopher Johnson explicó que la joven habría perdido el conocimiento entre 15 y 30 segundos después de ser asfixiada. Cannon continuó aplicando presión en su cuello, lo que resultó en un paro cardíaco fatal. Johnson también señaló que en el sistema de Brooke había niveles "potencialmente fatales" de GHB, además de cocaína y alcohol, según informa la BBC.
Esta semana ha comenzado el juicio en el que ha declarado la madre de la joven, Samantha Beaumont, que describió a su hija como una bailarina talentosa que había ganado una beca para una prestigiosa escuela de artes escénicas en Londres. "Brooke había trabajado como bailarina en Creta y tenía planes de regresar a Grecia", señaló la madre.
La madre también ha explicado también que su hija comenzó a cambiar su comportamiento al poco de comenzar a salir con él. También aseguró que era una persona controladora y que llegó a decirle dónde sentarse cuando se unió a la familia para Navidad.
El forense Martin Fleming emitió un veredicto de "homicidio ilegal" contra Brooke, indicando que, aunque ella estuvo de acuerdo con las prácticas sexuales, la actividad fue peligrosa e imprudente, resultando en su muerte. "Este tipo de actividad sexual es peligrosa e imprudente y con demasiada frecuencia tiene consecuencias fatales", dijo Fleming.
Las declaraciones de los amigos de la pareja describieron su relación como "experimental" y confirmaron el interés de Brooke en la asfixia erótica, lo que fue verificado por mensajes de texto encontrados por la Policía.
La señora Beaumont expresó el devastador impacto de la tragedia en su familia, destacando el futuro prometedor de su hija: "Georgia se ha ido, dejando un enorme agujero".
La trágica historia subraya los peligros de las prácticas sexuales extremas, especialmente cuando se combinan con el consumo de drogas.
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