A LAS AFUERAS DE WASHINGTON
El cierre de la base militar Andrews, próxima a Washington y donde tiene su base el avión presidencial estadounidense Air Force One, a primera hora de la mañana de este jueves por la supuesta presencia de un "tirador activo" ha resultado finalmente ser una falsa alarma. "Todo despejado", ha anunciado la base en su cuenta de Twitter, precisando que el cierre quedaba levantado pero sin ofrecer más detalles sobre lo sucedido.
Las alarmas habían saldado cuando la propia base, situada en Maryland a unos 24 kilómetros de la capital, había informado en su cuenta de Twitter de la "clausura" de las instalaciones por la presencia de un "tirador activo" y había ordenado a su personal que buscara refugio.
Posteriormente, había precisado que estaba previsto realizar "un ejercicio con un tirador activo, sin embargo, se recibieron informaciones de una situación de tirador activo real" en la instalación médica Malcolm Grow y que hasta allí se habían desplazado los equipos de emergencia.