A TRAVÉS DE SU CUENTA DE TWITTER
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha advertido al exdirector del FBI, James Comey, al que despidió el pasado martes, con que no se le ocurra filtrar a la prensa las conversaciones que mantuvo con él. "A James Comey más le vale que no haya cintas de nuestras conversaciones antes de que él empiece a filtrar a la prensa", aseguró Trump esta mañana en un críptico mensaje en la red de Twitter, que utiliza en ocasiones para expresar sus opiniones particulares.
James Comey better hope that there are no "tapes" of our conversations before he starts leaking to the press!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 12 de mayo de 2017
La amenaza de Trump llega después de que personas cercanas a Comey indicaran a la prensa que es "imposible" que el exdirector del FBI le confirmara al presidente que no estaba bajo investigación por posibles vínculos con representantes del Gobierno ruso, que habrían intentado interferir en el resultado de las elecciones.
En la carta en la que Trump notificó el despido inmediato a Comey, el mandatario añadió un extraño párrafo en el que agradecía a éste confirmarle "en tres ocasiones" distintas que no estaba bajo investigación del FBI en el caso de la posible coordinación de la campaña del republicano y representantes del Kremlin.
Esa posibilidad implicaría que Comey incumplió las normas de la primera institución policial y de investigación federal relativas a que no debe discutir investigaciones en marcha con personas implicadas o con intereses en las mismas.
Los medios de comunicación estadounidenses han destacado lo inapropiado de que el presidente, en una de las tres ocasiones a petición de la Casa Blanca, mantuviese conversaciones con el encargado de una investigación que podría salpicarle personalmente.
La Casa Blanca dijo en un comienzo que el despido estuvo motivado por las recomendaciones del Departamento de Justicia, del que depende el FBI, por el mal manejo de la investigación sobre las comunicaciones de Hillary Clinton, rival de Trump en las elecciones, cuando era secretaria de Estado.
No obstante, Trump ha vinculado indirectamente en todos sus comentarios desde la salida de Comey su decisión al manejo por éste de la investigación sobre Rusia, que el considera una invención sin fundamento para atacarle.