Brasil
Un diplomático alemán destinado al consulado de Río de Janeiro en Brasil ha sido detenido como principal sospechoso de haber asesinado a su marido, con quien estaba casado desde hace 23 años.
Hasta ahora, el nombre de Uwe Herbert Hahn no era muy conocido en todo el mundo, y quizás lo era en parte en el que es su país de origen, Alemania. Sin embargo, ahora ha pasado a ser mundialmente famoso, y no precisamente por algo positivo. Este individuo, hasta ahora diplomático en la ciudad brasileña de Río de Janeiro, ha sido detenido y encarcelado por las autoridades después de haberse convertido en el principal sospechoso de la muerte de su marido, a quien se cree que asesinó intencionadamente.
La detención se produjo el pasado sábado, con las autoridades argumentando que había contradicciones en su testimonio, y que las pruebas realizadas por los forenses indicaban que el fallecido tenía varios golpes antes de su muerte, lo cual podría indicar que estaba sufriendo agresiones antes. El equipo forense ha hallado hasta 30 lesiones en el cuerpo del fallecido, pruebas que consideran suficientes para sospechar que no fue una muerte accidental, y que hubo algo más que desconocen.
La comisaria de la Policía Civil brasileña responsable por la investigación, Camila Lourenzo, resaltó este último aspecto diciendo que, de las heridas que han podido encontrarse en el cuerpo del fallecido, "algunas de las lesiones no son recientes. Tienen al menos dos días, lo que muestra que la víctima venía sufriendo algún tipo de agresión". Aunque todavía debe indagarse más en esta cuestión, la detención del diplomático y su posible implicación en la muerte de su marido, con quien estaba casado desde hace 23 años, han causado un gran revuelo en Alemania.
Los abogados tachan de "ilegal" su detención
La detención de este diplomático ha supuesto un problema a nivel internacional tanto para Brasil como para Alemania. Los abogados del sospechoso acusan a las autoridades de haber violado el derecho internacional al haberle detenido y no haber respetado la inmunidad diplomática de la que goza por su estatus. El tribunal que decretó su ingreso en prisión señala que "la justicia tenía que limitarse a los aspectos formales y de circunstancia del delito practicado", rechazando que hayan vulnerado sus derechos procesales.
Las detenciones en países que no son el origen de los arrestados suelen traer consigo muchos conflictos diplomáticos, más aún tratándose de un funcionario de la Administración pública alemana que residía en Río de Janeiro desde hace más de 20 años. A falta de que se sepa si habrá juicio en Brasil o no, el diplomático continúa encarcelado, y, según apuntan los forenses, continúa siendo el principal sospechoso de la muerte de su marido, con más de 30 lesiones que podrían ser cruciales para esclarecer el caso.